Joe Arpaio es
el sheriff del Condado de Maricopa, en Arizona, y sigue siendo reelecto
período tras período.
He aquí las
razones:
El sheriff
Arpaio creó el campamento carcelario de carpas para evitar que Arizona
gastara decenas de millones de dólares en la construcción de otro complejo
carcelario.
Ha bajado el costo de la vianda a 30 centavos y les cobra a
los presos por su comida. Ha
prohibido fumar y mirar revistas pornográficas en las cárceles, ha retirado los
aparatos de entrenamiento y levantamiento de pesas, y ha cortado todo
espectáculo cinematográfico, exceptuando películas clase 'G'.
Dice: 'Están en la
cárcel para pagar una deuda con la sociedad, no para criar músculos y asaltar a
gente inocente cuando dejen la prisión'.
Inició cuadrillas
encadenadas para que los internos realicen trabajos en proyectos del condado y
la ciudad, ahorrándole dinero al contribuyente.
Entonces instauró
las cuadrillas encadenadas de mujeres, para que no lo acusaran de
discriminación.
Cortó la televisión por cable hasta que se enteró que
una orden de la Corte Federal exigía proveer con televisión por cable a las
cárceles. Volvió a conectar la televisión por cable, pero sólo permite el canal
Disney y el canal meteorológico.
Cuando le
preguntaron por qué conectaba el canal meteorológico, dijo: 'Así esto
sinverguenzas sabrán como será el tiempo cuando trabajen en mis cuadrillas
encadenadas'.
Cortó el café
porque tiene cero valor nutritivo y es por eso un derroche del dinero de los
contribuyentes. Cuando los internos protestaron, les dijo: 'Esto no es un hotel 5 estrellas. Si no les gusta, no vuelvan'.
También
adquirió la serie de clases de historia de Newt Gingrich, que transmite en las
cárceles. Cuando se le preguntó si también transmitiría las clases de historia
de un autor demócrata, contestó: 'Si la serie dice la
verdad, sería bienvenida, y hasta podría explicar por qué el 95 % de los presos
que llenan mis cárceles están allí en primer lugar'.
Las temperaturas en Phoenix fueron más
altas que de costumbre (43 ºC, un nuevo récord alcanzado el 2 de junio de 2007).
Associated Press escribió que aproximadamente 2.000 internos alojados en un
campamento de carpas rodeado por alambrados de púa fueron autorizados a
despojarse de sus ropas y quedar vestidos únicamente con sus calzoncillos color
de rosa proveídos por el gobierno.
El
día miércoles se escuchó comentar a los internos vestidos con calzoncillos
rosados en las carpas, donde las temperaturas llegaron a 53 ºC: 'Esto es el infierno, estamos adentro de un
horno', se quejó Ernesto
Gonzalez, con dos años de condena cumplida y diez más para cumplir,
'es inhumano'.
Joe Arpaio, que obliga a sus presos a vestir de rosado y
comer sándwiches de mortadela, no es condescendiente en absoluto: 'Los criminales deberían ser castigados por sus
crímenes, no
vivir a todo lujo hasta que les llegue la libertad condicional, sólo para que
salgan a cometer más crímenes y volver para vivir a costas del contribuyente y
disfrutar de cosas que los mismos contribuyentes no pueden afrontar para
sí'.
El mismo día les dijo a los internos que se quejaban por
las temperaturas en las carpas: 'Tenemos entre 48 ºC
y 54 ºC en Irak, nuestros soldados allí también viven en carpas, caminan todo el
día bajo el sol cargados con sus pertrechos de guerra, encima les disparan y
ellos no han cometido ningún crimen, de modo que cállense la
boca'.
¡Adelante, sheriff! Si todas las prisiones fuesen como
las suyas habría muchos menos crímenes y no estaríamos en la situación actual de
emergencia carcelaria por falta de espacio.
Si les gustó,
reenvíenlo Si no les gustó, bórrenlo.
Al margen: Joe fue
recientemente reelecto como sheriff del condado de Manicopa,
Arizona.
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