Está la noche tranquila y la fuerte luz de las estrellas bordan el manto del cielo.
Yo camino bajo palio dejando prendidos de su tapiz todos mis deseos
En el silencio se oye el arrastre de la hierba por algún animal nocturno, pero yo voy haciendo recuento de anhelos.
El amanecer recogerá mis sueños
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