
Era fiel, y le gustaba jugar. Era cariñoso y salamero. No me dejaba sola nunca, siempre andaba a mis pies, siempre me esperaba en las noches hasta el último momento; sin embargo, permitíame que le acariciase cuando me estaba pidiendo algo y esperaba que se lo diese.Otra cosa que no consiente es que le molesten cuando está en su sueño más profundo.
Entendía todo lo que se habla, palabra por palabra, estoy convencida de ello. Cuando pido que le saquen, aunque lo diga de mil maneras diferentes, el se prepara corriendo para ello. Debe pensar que soy yo la que mando, porque cuando quiere algo y no se lo dan, enseguida viene a pedírmelo a mí para que vaya a convencerles; es un llorón.
Es guardián hasta la médula. Ladra hasta asustar cada vez que alguien viene a casa;
A pesar de sus ya muchos años,pensaba que no podría prescindir de el. No quisiese pensar el día que me falte…
Ese día llegó.....
Suempre te recordaré, fiel amigo....


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