Hace 122 años, Chile se quedó con el ombligo del mundo. Se hizo con la Isla de Pascua o Rapa Nui, el lugar memos habitado del planeta. Nos lo recuerda Nieves Concostrina
ABORIGEN DE LA ETNIA RAPA NUI
ISLA DE PASCUA . FOTOGRAFÍA AÉREA .
La isla de Pascua, de nombre indígena Rapa Nui, es uno de los lugares más remotos de la Tierra, distante 3.600 km de la costa americana. En su interior se guarda uno de los misterios más asombrosos, el de las grandes estatuas llamadas moai. Hechos de toba volcánica, los moai, de los que se conocen cerca de 900, tienen una altura media de 5 m y 14 toneladas de peso, aunque el mayor pesa 80 toneladas. Su función debió ser ritual, pudiendo representar a antepasados importantes. Levantados alrededor de los siglos XII al XVII, varios moai se colocaban sobre plataformas llamadas ahu. Los ahu constaban de un muro trasero reforzado, otro delantero de retención y una rampa. La estatua, con su pukao o tocado, apoyaba sobre una losa y un relleno de escombros. En el interior del ahu podía haber una cámara funeraria. La construcción de un moai era sencilla. Primero delineado en la roca, era después tallado, dejando una quilla en su espalda que lo mantenía unido a la roca. Acabado el trabajo, se rompía la quilla y se dejaba deslizar ladera abajo hasta un foso, en el que se labraba su espalda. Pero el gran misterio es cómo pudieron ser transportadas estas inmensas moles desde el lugar en el que fueron talladas, la cantera de Rano Raraku, hasta sus emplazamientos en el litoral, sin la ayuda de animales de carga. El investigador Thor Heyerdahl propuso que el moai era transportado sobre un trineo, que se deslizaría gracias a lubricantes vegetales. Mulloy sugirió la ayuda de dos grandes postes unidos en V y un trineo curvo, moviendo la estatua gracias al balanceo. Pavel dice que pudieron moverse en vertical, inclinado hacia un costado y luego balanceado hacia adelante. Un trineo de troncos sobre rollos de madera es la hipótesis sugerida por Love. Finalmente, Van Tilburg sugirió que las estatuas debieron recostarse sobre un trineo, que avanzaría a su vez sobre rollos de madera. Probablemente este misterio, como el del fin de la cultura pascuense, nunca nos será desvelado.
Un moai (del rapanui moai, "escultura") es una estatua de piedra monolítica de la Isla de Pascua, Chile, ubicada a 3.600 km al oeste de su costa continental y 2.100 km de Pitcairn de la Polinesia Oriental, siendo una de las islas mas lejanas de la Polinesia, encontrándose actualmente bajo la administración y soberanía chilena.
Los moais son el principal atractivo turístico de esta isla chilena, cuyos habitantes viven del turismo y la pesca.
Los más de 600 moais conocidos tallados por polinesios están distribuidos por toda la isla. La mayoría de ellos fueron labrados en toba del volcán Rano Raraku, donde quedan cerca de 400 moais más en diferentes fases de acabado. Todo indica que la cantera fue abandonada repentinamente, quedando estatuas a medio labrar en la roca. Prácticamente todos los moais terminados fueron posteriormente derribados por los isleños nativos en el período siguiente al cese de la construcción.
Los primeros navegantes europeos que a comienzos del siglo XVIII llegaron a la Isla de Pascua no pudieron creer lo que estaban viendo. En esa pequeña área de tierra, descubrieron cientos de estatuas enormes sobre la superficie de toda la isla.
Actualmente, los moais son finalistas de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo.
El significado de los moais es aún incierto, y hay muchas teorías en torno a estas estatuas. La más común de ellas es que las estatuas fueron talladas por los habitantes polinesios de las islas hace al menos 500 años. Se cree que habrían sido representaciones de antepasados difuntos (como señales lapidarias) o quizá de personajes importantes vivos, además de símbolos de estatus familiar.
Se cree que montañas enteras fueron removidas para su creación. La roca volcánica fue cortada con facilidad, y rocas masivas que pesan miles de toneladas estaban tiradas en varios lugares donde no pudieron ser refinadas. Cientos de estatuas enormes, algunas de hasta 10 o 12 metros de altura y 50 toneladas de peso, han llegado hasta nuestros días. En un principio, estas estatuas gigantes llevaban también unos sombreros de piedra roja, llamados pukao, que pesan más de 10 toneladas, y en ocasiones se encontraban muy lejos de las estatuas, aunque después debían ser levantados a la altura debida para colocarlos sobre las cabezas.
Deben haber sido extremadamente caros de construir: no sólo el tallado de cada estatua habría necesitado varios años de esfuerzo, sino que después debían ser trasportados por la isla hasta su ubicación definitiva. No se sabe exactamente cómo eran trasladados, pero es casi seguro que dicho proceso exigió el uso de trineos o rodillos de madera. Una segunda teoría apunta a que fueron movidos balanceándolos con cuerdas, aprovechando sus bases redondeadas para hacerlos avanzar "como un refrigerador". Como respaldo a esa teoría están varias estatuas a medio construir que mostraban las características antes mencionadas.
Un dia más he de dare las gracias por los maravillosos mensajes que nos dejas ebn Danza y que contribuyen a ensanchar nuestros conocimientos y cultura.