ADIÓS AL LLANTO.
¡No más, no más triste llanto,
enterraré, optimista mis penas,
como también las ajenas,
volviendo con esplendor al canto!
¡No más, mostrar el desencanto,
vivir la vida con sus colores,
con, malos y buenos sabores,
bailaré, reiré, amaré con encanto!
Feliz estoy de haber tomado
el digno camino, sin trampa,
consiguiendo mi sueño anhelado.
¡Sensible imagen, bella estampa,
sabor suave y acaramelado,
levanto mi copa y brindo...
¡ADIÓS AL LLANTO!
Soledad García Baena