Es bueno soñar pero no es suficiente.
La chispa que genera la explosión de arranque y posterior combustión de un motor, es imprescindible pero no suficiente.
El arranque o la "chispa inicial" no alcanza para garantizar un proceso lento, trajinado, complejo y hasta "titánico" como representa la realidad de la vida de cualquier ser humano.
Es bueno soñar pero, es casi patológico vivir soñando. Sin sueños es imposible arrancar porque ellos son la matriz de nuestras acciones más fructíferas y lo que dá sentido a seguir viviendo.
Es imperioso, luego de los sueños; fijarse METAS.
La diferencia entre sueños y metas es que los primeros no tienen fecha de realización ni acciones definidas que conduzcan a su alcance, mientras que las metas SI.
de la red.-
Los grandes soñadores deben transformarse en grandes realizadores.
(Esta reflexión pretende ser un humilde aporte de quien alienta, cara a cara, a mucha gente para concebir nuevos proyectos de vida; construir sólidos cimientos y abrazarlos con pasión hasta hacerlos realidad.)