Como ave perdida
apareces de la nada
en mi lienzo…
briosa, sumisa
bates tus alas
y agitas el viento.
Tienes la figura de un ángel
que resplandece mi cielo,
un destello silente
en mi desenfreno,
allí donde muere la tarde
y la luna asoma su sonrisa.
Luz que ilumina
con dulzura infinita,
cuando resurge tu mirada
y veo tus ojos en cada esquina,
dulce delirio que renace
y me hace volar...