Tu sonrisa florece al cosquilleo
Del Sol travieso de ternuras
Legando en la esquina del tiempo
Pliegues de piel de serenidad
Prodígame poesía de tu boca
Con tus manos llévame al espíritu
En donde respira tu esperanza
Para escuchar el tono de tu amor
Desviste en silencio mi desconsuelo
Abrígame en tus noches derrochadas
En romances de gentiles insulsos
Que hunden en tus pechos espinas
Enjuagare los besos superficiales
Con lágrimas percudidas de soledad
Señalare los lunares de tu cuerpo
En ofrendas a la alianza inmortal
Sombra que deambula buscándome
En caminos envilecidos de máscaras
Siénteme en tus adentros depurados
De impudicia erguida de deseo…