Estrategias para fomentar buenas calificaciones en los hijos
Si estás leyendo esto, entonces debe ser importante que tu hijo tenga buenas calificaciones en la escuela.
Animar e inspirar a los niños a obtener buenas calificaciones es un reto que enfrentan muchos padres, y algunos han sido muy exitosos. Cada niño es único, requiere estrategias diferentes, pero con las siguientes ideas, vas a encontrar unos cuantos métodos para probar y ver cuales funcionan mejor con tu hijo.
¿Por qué obtener buenas calificaciones?
Para que tu hijo acepte la idea de estudiar para sacar buenas calificaciones, tiene que entender por qué es importante.
Decirle a un niño de tercer grado que sus notas le permitirán ir a una prestigiosa universidad, probablemente no lo motivará a trabajar. Sin embargo, explica que si hace su tarea a tiempo, tendrás tiempo para llevarlo a un partido de fútbol, por ejemplo. Sin duda se evitará el estrés de hacer la tarea a las apuradas la noche anterior a su entrega.
La clave es asegurarte de que estás hablando en términos que él entiende.
¿Por qué trabajas?. Los padres que trabajan principalmente para ganar dinero y comprar cosas suelen criar a sus hijos con las mismas motivaciones. Sin embargo, si estás trabajando porque eres un apasionado de tu trabajo, es más fácil inculcar la pasión en tu hijo.
Comunicar las razones de los logros, en términos que tu hijo pueda entender, es el primer paso para obtener buenas calificaciones.
Una vez que hayas comunicado que las buenas calificaciones son importantes, hay algunas estrategias definidas que puedes utilizar para animar a tu hijo a lograr calificaciones más altas.
Una lista de recompensas apropiadas
Cuéntale cómo recibes bonos o recompensas en el trabajo por hacerlo bien. Habla acerca de cómo tus logros afectan tus ingresos y cómo te sientes más positivo cuando haces un buen trabajo. Si tu hijo tiene dificultad para elegir las recompensas apropiadas, dale tus sugerencias, tales como:
- Tiempo a solas con un padre (funciona bien en familias numerosas)
- Invitar a un amigo a dormir
- Tiempo extra en la computadora
- Comprar un juego para toda la familia
- El derecho de elegir la cena o el restaurante
- Una tarde de diversión al aire libre en el parque
- Un fin de semana en casa de la abuela u otro pariente
- Ir al cine, su tienda favorita, alquilar películas o juegos
- Quedarse una hora más a la noche, pasado el “toque de queda”
Los niños pequeños pueden esforzarse más si se cuelga la lista de recompensas en el refrigerador o su habitación. La lista también puede funcionar en niños mayores, a pesar de que él quizá no quieran mostrarla.
Reforzar positivamente lo que tu hijo hace bien
Un método creativo y simple es colgar las calificaciones donde los visitantes las vean, ofreciendo la oportunidad de más refuerzo positivo.
No estás presumiendo las notas de tu hijo, estás buscando que la gente lo alabe por sus buenas calificaciones, impulsarlo a seguir.
Mantenerse al tanto de su tarea escolar
Estamos todos ocupados, pero es importante que los padres sepan exactamente lo que su hijo está haciendo en la escuela. Incluso si tu hijo no necesita ayuda con la tarea, revísala periódicamente para ver cómo va. Muestra un interés sincero en su trabajo, esto será un estímulo y un incentivo para hacerlo bien. Pide ver el cuaderno de tu hijo y sus exámenes periódicamente.
Conseguir un profesor particular
Tu hijo puede llegar a un punto en el que un profesor particular puede hacer la diferencia. Habla con tu hijo acerca de situaciones en las que necesita un especialista que lo ayude, y explica que esperas que la situación sea temporal.
Puedes tener la inteligencia para ayudar a tu hijo, pero a veces los padres simplemente no son los mejores maestros de sus hijos.
¿Qué hay del dinero como incentivo?
Hay opiniones encontradas sobre esta estrategia. Esto funciona bien para algunos niños, pero no todos los niños responderán. Cómo presentas el premio hace un mundo de diferencia. Si tu hijo ve el dinero como ganado, al igual que ganas tus ingresos, eso está bien.
Simplemente no quieres que se confunda con los aspectos financieros, y olvide el valor real de su educación. Otra preocupación es que algunos niños empiezan a creer que se les paga por hacerlo todo.
¿Qué hay con los niños que tienen discapacidades de aprendizaje?
“Buenas calificaciones” debe ser definido como lo mejor que tu hijo es capaz de hacer. Nunca es algo bueno comparar a los niños, incluso entre hermanos. Estas comparaciones no son justas, porque todos tenemos nuestras fortalezas y debilidades. Céntrate en las fortalezas de tu hijo y trabaja para ayudarlo a compensar las debilidades que no puede superar.
¿Qué hay con un niño que no responde a las recompensas?
Comunicarte con tu hijo desde el principio te dará una idea de lo que él valora. Es por eso que es importante intercambiar ideas con él para determinar lo que va a encontrar más gratificante. Los niños sanos tienen intereses y deseos que dan lugar al refuerzo positivo de algún tipo.
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