Quizás resulte muy difícil lograr que los sueños se hagan realidad.
Tal vez si tratamos de ahorrar esfuerzos, olvidaremos la razón por la que comenzamos a soñar, y al final descubriremos que el sueño ya no nos pertenece.
Limitémonos a seguir los dictados del corazón, y el tiempo se hará cargo de que alcancemos nuestro destino.
Recuerda: Cuando estés a punto de rendirte, cuando pienses que la vida ha sido injusta contigo, recuerda quien eres. Recuerda tu sueño.
|