Calle Sierpes (o de las Sierpes) es el nombre de una tradicional y concurrida calle comercial de Sevilla (Andalucía, España).
Siendo conocida por todos los sevillanos, se sitúa en el centro de la ciudad, comenzando en la plaza de la Campana y terminando en la plaza de San Francisco, donde a su vez se halla el Ayuntamiento.[1]
La calle, peatonal, está llena de comercios, reconocidas confiterías, cafeterías, y tabernas, por lo que siempre hay sevillanos, forasteros y extranjeros transitándola, de compras o aprovechando su tiempo de ocio.[2] También pueden encontrarse estatuas humanas, mimos, músicos, pintores e incluso mantas de improvisados vendedores ambulantes.
Con la llegada de la primavera y el buen tiempo, hasta la finalización del verano, se colocan toldos a la altura de las azoteas, quedando ésta, y otras calles próximas, completamente entoldadas, lo que produce una sensación de alivio, al tiempo que resguarda del calor a los viandantes.[2]
En realidad, y en la actualidad, aunque sustenta el nombre, la importancia de Sierpes se diluye entre la totalidad de las calles que conforman el Centro de Sevilla, ya que al estar en gran parte peatonalizado, constituye un espacio comercial muy atractivo para ciudadanos y visitantes