Hoy le he contado a mi nieto los grandes cambios que ha habido en la vida desde que yo, su abuelo, era un niño.
Mira, cuando yo era un niño como tú lo eres ahora, mi mamá me mandaba a la tienda que había en la esquina con 100 pesetas, lo que ahora son 60 céntimos de euro, para hacer la compra.
Yo regresaba a casa con ¡¡¡dos envases de mantequilla, dos litros de leche, un saco de patatas, dos quesos, un paquete de azúcar, una barra de pan y una docena de huevos!!!
Y mi nieto me ha respondido:
Abuelo, ¿en tu época no había cámaras de vigilancia?