Señor Wert, basta. Basta de tratarnos a los padres como a estúpidos con consejos como "reutilizar los libros" si no podemos pagarlos. Como si no se nos hubiera ocurrido. Como si siempre fuera posible. O con eufemismos como que "el número de alumnos por clase no aumenta, se flexibiliza". Entonces, ¿por qué no lo flexibilizamos, pero a la baja? Ah, que no pasa nada, que según los estudios de la OCDE, solo se pierde eficacia en grupos de más de 45 o 50 alumnos, o sea que tenemos todavía mucho margen de flexibilidad.
Basta de recortar en profesorado. Basta de segregar a los que se quedan rezagados. Basta de fomentar la desigualdad reduciendo becas y subiendo tasas. Si realmente le interesa mejorar la competitividad de las futuras generaciones y sacarnos del primer puesto en fracaso escolar en Europa, recuerde que los sistemas educativos más exitosos en el informe Pisa tienen en común la calidad y formación de sus profesores y la intervención temprana para que ningún niño se quede atrás.
Basta de buscar titulares y crear polémicas. Basta de desunir y provocar en vez de buscar consensos. Basta de utilizar la educación de nuestros hijos como instrumento para imponer su ideología. Haga su trabajo, procure que el sistema educativo sea el mejor posible para todos, hasta para los que le critican. No es su futuro, señor Wert, el que está en juego. Es el nuestro.
ACTUALIZACIÓN: Acabo de conocer y firmar la petición de la ONG Educación sin Fronteras, recogida en Lo que hay que Wert, para que los presupuestos destinados a Educación para 2013 vuelvan, como mínimo, a los niveles de 2011.