Despedida
Entre mi amor y yo han de levantarse trescientas noches como trescientas paredes y el mar será una magia entre nosotros.
No habrá sino recuerdos. ¡Oh tardes merecidas por la pena! Noches esperanzadas de mirarte, campos de mi camino, firmamento que estoy viendo y perdiendo.... Definitiva como un mármol entristecerá tu ausencia otras tardes.
Autor: Jorge Luis Borges
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