A MI MADRE
A mi madre que noche a noche llora conmigo, que día a día sufre conmigo.
Esa mujer de la que hoy escribo, que no le importa desvelarse con tal de estar conmigo, esa mujer es mi madre.
Fuente de mi vida, de mis ganas de vivir. Ella me abraza y me besa, me ayuda y sobre todo vive conmigo la vida.
Ella que en ningún momento dudó en darme un amor de madre pendiente de mí en los golpes y tropiezos de la vida.
La hermosa y bella imagen de mi madre la llevo en el corazón en mi pensamiento en mi alma y sobre todo a ella la llevo dentro de mí.
Que con su sufrimiento me enseñó las lecciones de la vida. Me enseñó a caminar, a levantarme si me caigo, a aprender de mis errores.