El aislamiento social
En algún momento de nuestras vidas, todos hemos sentido la necesidad de estar solos y nos alejamos un poco de quienes nos rodean, siendo totalmente normal. Sin embargo, cuando este aislamiento es indefinido y la persona deja de mantener todo tipo relación con el resto de su entorno, la situación debe ser vista como un problema que necesita atención.
El aislamiento social, también conocido como “social withdrawal”, se presenta cuando una persona se aleja totalmente de su entorno de manera involuntaria aunque pueda pensarse lo contrario. Esta condición se da en personas de todas la edades y puede ser una consecuencia de hechos traumáticos de su historia, como haber sido víctima de bullying o como parte de alguna condición médica, como la depresión.
Causas del aislamiento social
A pesar de que se han llevado a cabo diferentes estudios para identificar las causas específicas del aislamiento social, la realidad es que estas son muy diversas y dependen de cada situación particular.
En algunos casos puede deberse a que la persona ha vivido condiciones anormales en su infancia, como haber sido víctima de bullying o que haya estado bajo una extrema sobreprotección que les impidió relacionarse de forma normal con otras personas de su edad, generando una falta de seguridad y conocimiento para establecer nuevas relaciones cuando es adulto.
Otro de los casos se da cuando la persona tiene algún tipo de condición médica que le complica o imposibilita salir. En esta situación, es posible encontrar gente que después de algún accidente médico se aparta completamente del resto de la gente. También es posible encontrar esta condición en personas que no sufren de una condición médica extrema, pero que se enfrentan a condiciones médicas que los alejan o generan estereotipos, como algunos trastornos mentales.
Consecuencias del aislamiento social
Quienes viven bajo esta condición suelen enfrentarse a diversas situaciones y problemas, siendo el más común y más grave
la depresión. Sin embargo, diversos estudios que se han realizado indican que las personas que viven el aislamiento social suelen tener
problemas de aprendizaje, la atención y en la toma de decisiones.Esto se debe a que cuando no nos relacionamos con nuestro entorno, nuestro cerebro no recibe los estímulos adecuados y no trabaja de la forma adecuada. Por este motivo, las personas que viven en aislamiento social pueden parecer un poco torpes o lentos al momento de tomar decisiones.
¿Qué hago si vivo en aislamiento social?
Si ya te has dado cuenta de que vives bajo esta condición y realmente quieres salir de la misma, lo primero que debes hacer es buscar los círculos sociales en los que te sientas a gusto y comenzar a visitarlos. Por ejemplo, si te gustan los perros y tienes uno, puedes llevarlo a caminar al parque. De esta manera, comenzarás a socializar con otros dueños de perros.
Para salir del aislamiento social es básico que te abras a nuevas experiencias, que aprendas a salir de tu zona de confort y que te pongas en situaciones nuevas.