Seis ideas para vivir al máximo
A menudo vamos por la vida preocupándonos por nimiedades que hacen del día a día un reto en vez de un regalo. ¿Cuántas veces te has "deprimido" por no tener más dinero o por no poder comprar algo que querías? Muchas veces caemos en la trampa y terminamos buscando cambiar lo material, modificar lo que nos rodea, a la caza de ese estado óptimo con el que sentirnos bien. Al final, acabamos comprando algo, logrando esto otro, pero en seguida queremos más, nos preocupamos por todo cuanto ocurre y nada parece llenarnos. En respuesta, insistimos en el intento de realizar cambios sobre lo exterior, nos frustramos, pero no nos planteamos otras alternativas...
¿Y si el que tiene que cambiar eres tú? Preocúpate por aquello que realmente merece la pena; preocúpate por ti. Aquí te dejamos seis indicaciones que te ayudarán a no olvidar lo que realmente es primordial en la vida:
1. Cada momento importa: aprovéchalo.
"El pasado es historia; el mañana es un misterio. ¿Y hoy? Hoy es un regalo. Es por eso que lo llamamos presente." B. Olatunji
Vive el momento, pues el pasado ya se fue y el futuro nunca llega; es más, el futuro dependerá de lo que hagas ahora mismo. Eres tú y tu presente: úsalo bien.
2. Sé feliz, pues la felicidad no es un fin, es un estado.
“La felicidad no es el destino, sino la forma de viajar...”¿Qué prefieres? ¿Estudiar, formarte y trabajar para ser feliz ó estudiar, formarte y trabajar siendo feliz?
Todo lo hacemos para ser felices, pero, al final, la felicidad es víctima de una búsqueda eterna. Piensa: ¿no te pasa que a partir del momento en el que algo malo te ocurre, todo te molesta? Al final, prestas atención y te entristecen cosas absurdas que normalmente pasarían desapercibidas.
Bien, pues al igual que la tristeza, la felicidad se contagia. Sé feliz ahora, pues si intentas ver el lado bueno de las cosas, empezarás a alegrarte por cosas simples a las que antes no prestabas atención.
3. Sé quien realmente eres.
“Sé tú mismo, los demás puestos ya están ocupados." Oscar Wilde
Para vivir el momento y ser feliz en él, debes ser coherente contigo mismo.
A menudo, nos dejamos influenciar por presiones sociales de variado tipo y nos desviamos de lo que realmente somos, queremos y necesitamos. Pero, ¿sabes qué? Comprobado está que todo ser humano sobre la tierra es distinto, ya no solo por su genética, sino también por su experiencia. No vayas en contra de la naturaleza: sé distinto, sé tú mismo.
4. Haz por los demás y los demás harán por ti.
“Todos los días me recuerdo a mí mismo cientos de veces que mi vida interior y exterior está basada en el trabajo de otros hombres, vivos y muertos, y que me debo dedicar yo mismo a dar en la misma medida que he recibido y sigo recibiendo.” Albert Einstein
Siempre que haya un humano necesitado, habrá una oportunidad para la amabilidad y para marcar la diferencia. Pequeños actos hacen del mundo algo mejor.
Sé algo para alguien, marca la diferencia en una persona y a su vez esa persona será diferente y marcará la diferencia en los demás. Al final, somos animales sociales y necesitamos sentirnos queridos. Lucha por la sociedad y estarás luchando por ti.
5. Busca tu propio propósito en la vida y brilla por ti mismo.
"La clave de una vida feliz es alcanzar metas de las que te sientas orgulloso y un propósito que cumplir." Jeff Lindsay
Antes decíamos que todos somos distintos. Entonces, ¿acaso alcanzar la felicidad y sentirnos realizados se rige siempre por la misma ecuación?
No imites a los demás. Añade a sus fórmulas tantos matices como desees y crea tu propia ecuación. Crea la ecuación de tu vida y ella se convertirá en tu propósito.
6. Identifica tus valores.
"Felicidad es ese estado de consciencia que procede del logro de los propios valores." Ayn Rand
Para ser feliz y coherente, debes conocer tus valores. Sé honesto contigo mismo e identifícalos. Si actúas siempre de acuerdo con tus valores, confiarás en ti mismo y tus días no serán un reto, serán hojas en blanco que llenarás sin arrepentirte.
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