A TI, QUE TE LLEVO EN MI CORAZON
Siempre serás un dulce recuerdo; ya que te llevo aquí clavada en mi pecho,
quise liberarme de ti pero sentí más dolor que aquel día de tu partida;
tus besos fueron muy profundos y no los puedo borrar; tus caricias quemaron
como las brasas y la cicatriz en mi piel será eterna;
tantos momentos formados por segundos llenos de amor y pasión; miradas de ternura
en cada noche de luna llena caminando de la mano cobijado de tu sombra;
siento que no te he perdido más aun cuando sé que fuiste feliz estando a mi lado…
Ahora cada mañana veo en la ventana aquella sonrisa con la cual me decías te amo
y me enamoro cada vez más con la imagen tuya que lleva el cielo azul de cada amanecer;
debo ser sincero porque debes saber que no dejaré de amarte aun cuando los
días pasen y los años pesen más sobre mí, aunque sé dónde estás no puedo ir a
buscarte porque me pediste que siguiera mi camino; recuerdo la promesa que te
hice aquel día cuando me decías que ya no estarías más conmigo y aunque ese día
sufrí como jamás lo había hecho yo cumpliré mi palabra por todo este amor que siento por ti…
Lo que nunca podré entender será el porqué de tu partida y es que ¿acaso si hice algo
malo jamás lo supe?; y lo mejor que teníamos era todo este amor o es que no es
aceptable para el destino, el que dos personas puedan ser felices que buscara siempre el
terminar con un amor como el nuestro, pero si hay algo que no pude aceptar es el que te
fueras sin mirar hacia atrás cuando tenías mucho que recordar y tener así más de un
motivo por el cual te podías quedar pero decidiste irte y me dejaste con el corazón destrozado…
Lo que sé es que jamás encontraré a alguien que me haga sentir lo mismo que tú
y no podría ni quiero reemplazarte; mis días contigo fueron días iluminados a plenitud
con todo ese cariño que solías entregar; si hay palabras que pueda yo usar para definirte
pues te diría que eras única y especial, tierna y maravillosa, dulce y sencillamente
llena de amor, quisiera tener la oportunidad de decirte que me quedaba más amor
por demostrarte, y sólo quisiera poder decirte nuevamente mirándote a los ojos
que te amo pero eso es imposible…
Sólo mi Dios y tú saben que ante el altar fui sincero y sólo mi Dios sabe que
cuando decidió llamarte quise irme contigo; pero mi promesa fui continuar
por aquellos hermosos hijos que me diste; sólo recuerda mi bella esposa que te amé,
te amo y te seguiré amando; y espero con tantas ansias que algún
día Dios me permita estar nuevamente a tu lado.
Desconozco autor