PARA ANUNCIAR EL ADVIENTO
Éste es el tiempo de la espera, del anhelo y la ilusión
Es un tiempo de ojos abiertos,
de miradas largas como el horizonte y de pasos ligeros por oteros y valles.
Es el tiempo de las salas de espera,
de los sueños buenos que soñamos
y de los embarazos de la vida.
Es tiempo de anuncios, pregones y sobresaltos;
de vigías, centinelas y carteros,
de trovadores y profetas
Es tiempo de luces y coronas,
de puertas y ventanas entreabiertas,
de susurros, sendas y parteras.
Es tiempo de pobres y emigrantes,
de cadenas y cárceles rotas
y de hojas con buenas noticias.
Es el tiempo de Isaías, Juan Bautista y María;
y de José, quitando fantasmas,
embarcado en la aventura
y pasando las noches en claro.
Florentino Ulibarri. “Al viento del Espíritu