Mi verso
Querria que mi verso, de guijarro, en gema se
trocase y en joyeroque fuera entre mis manos
como el barro en la mano genial del alfarero.
Que lo mismo que el barro, que a los fines
del artifice pliega sus arcillas, fuese caliz
de amor en los festines y lampara de
aceite en las capillas.
Que docil a mi afan tomase todas las
formas que mi numen a soñado siendo
alianza en el rito de las bodas pastoral en
el index del prelado.
Lima noble que un grillo desmorona o eslabon
que remata una cadena, crucifijo papal que
nos perdona o gran timbre de rey que
nos condena.
Que fingiese a mi antojo, con sus claras facetas
en que tiemblan dos destellos, florones para
todas sus tiaras y broches para todos los
cabellos.
Emblema para todos los amores, espejos para
todos los encantos, y coronas de astrales
resplandores para todos los genios
y los santos.
Yo trabajo mi fe no se mitiga, y troquelando
estrofas con mi sello, un verso acuñare
del que se diga, tu verso es como el oro
sin la liga, radiante, ductil, poliforme y bello.
Amado Nervo
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