¿Cuál es la diferencia entre la escuela y la vida? En la escuela te enseñan una lección y después pasas por una prueba. En la vida, pasas por una prueba y te enseñan una lección.
Lo cierto es que la vida nos enseña muchas cosas que, a veces, no somos capaces de entender o de explicar. Sin embargo, de una manera u otra, hay cientos de aprendizajes que nos llegarán a todos, a pesar de que podamos o no hacer uso de ellos. Veamos algunos de ellos a continuación…
Lo importante es luchar para vivir la vida, para sufrirla, para gozarla, perder con dignidad y atreverse de nuevo. La vida es maravillosa si no se le tiene miedo. Charlie Chaplin
Con cada día que vivo estoy más convencida de que el desperdicio de la vida radica en el amor que no se ha dado, en los poderes que no se han utilizado, en la prudencia egoísta que no arriesga nada y que, evitando el dolor, nos impide alcanzar la felicidad.
Mary Chomodeley
En la vida hay tres cosas que no vuelven atrás: la flecha lanzada, la palabra pronunciada y la oportunidad perdida. Proverbio chino
El verdadero amor no se reduce a lo físico ni a lo romántico, el verdadero amor es la aceptación de todo lo que el otro es, de lo que ha sido, de lo que será y de lo que ya no es.
La manera en la que tú ves el mundo es tu versión personal de él. Nadie más comparte la misma versión de la realidad.
Recuerda que el sentido de la vida no es precisamente el de obtener todo lo que queremos, sino más bien en saber compartir todo lo que tenemos y sabemos.
El valor del amor, de la familia y de la amistad…
Una amistad no crece por la presencia de las personas, sino por la magia de saber que aunque las ves las llevas en el corazón.
La verdadera amistad no se trata de quién vino primero o de quién te conoce más tiempo. Se trata de quién llegó y nunca se fue.
La familia no siempre es de sangre. La familia son las personas en tu vida que te quieren en la suya. Son aquellos que te aceptan por quién eres. Aquellos que harían cualquier cosa por verte sonreír y aquellos que te aman sin importar nada.
Si no cuidas a alguien en tu presente, no esperes verles en el futuro, pues para entonces ya serás su pasado.
Y, por último, mi favorita…
Me gusta el verbo “resistir”. Resistir a lo que nos aprisiona, a los prejuicios, a los juicios precipitados, a las ganas de juzgar, a todo lo que es malvado en nosotros y que sólo quiere expresarse, a las ganas de abandonar, a la necesidad de quejarse, a la necesidad de hablar de uno mismo en detrimento del otro, a las modas, a las ambiciones malsanas, al desconcierto ambiente. Resistir, y… sonreír.
EMMA DANCOURT
lamenteesmaravillosa.com