¡Aplica la abundancia a tu vida!
“Cuando persigo el dinero nunca tengo lo suficiente. Cuando mi vida está concentrada en un propósito y en dar lo mejor de mí, me vuelvo próspero.”
(Wayne Dyer)
¿Qué es ser abundante?
Ser abundante es tener gran cantidad de algo, pero ese “algo” no se debe entender en términos estrictamente económicos, sino en el sentido más amplio de la palabra.
Puedo ser abundante porque viajo con mi familia, porque ayudo a los demás, porque me dedico a lo que me apasiona…
Por lo tanto, la abundancia hay que entenderla en sentido amplio. No pienses únicamente en dinero, piensa en lo que te hace sentirte bien y feliz.
La primera pregunta que nos tenemos que hacer es:
¿Cómo nos sentimos: abundantes o carentes?
La influencia de las creencias limitadoras
Según sostiene Enric Corberá, psicólogo y diplomado en Neurobioemoción, existen una serie de creencias limitadoras que tenemos arraigadas en nuestra mente y que nos impiden vivir en la abundancia.
El trabajo o la idea que tenemos del trabajo es una de esas creencias limitadoras, porque partimos de la idea de que para recibir hay que dar, de que sólo merecemos las cosas por el trabajo duro, el esfuerzo y el sacrificio que realizamos para obtenerlas.
Nos parece que si obtenemos abundancia sin esfuerzo estamos haciendo algo malo.
Cuando alguien nos ayuda sin pedir nada a cambio solemos pensar: ¿qué querrá?, ¿por qué me ayuda?, ¿qué espera de mí? No logramos imaginar que nos ayuda porque quiere hacerlo, porque se siente bien ayudando, sin esperar nada.
Otra de las creencias limitadoras que tenemos arraigadas es el apego a lo que poseemos. Tenemos miedo a perder lo que poseemos. Miedo a perder a nuestra pareja, a perder dinero, a perder nuestro trabajo.
Pero la realidad es que cuando tienes, debes estar dispuesto a dejar ir para que entre lo nuevo. Por ejemplo, si tengo una pareja que ya no me quiere o no quiere estar conmigo, es mejor dejarla ir, esa es la única forma en la que podrá entrar alguien nuevo en nuestra vida o quizás no, sino que simplemente viviré mi soledad con alegría y me descubriré como persona.
En muchas ocasiones, tendemos a perseguir dinero u otros símbolos de riqueza como un reloj caro, un coche, etc. Una pregunta esencial en este sentido es ¿para qué lo quiero?
Si la respuesta es “para obtener un estatus”, lo que realmente denota nuestra forma de perseguir el dinero o los símbolos es que nuestra autoestima no está bien, porque necesitamos algo que simbolice un estatus.
porque el inconsciente nos traerá lo que cree que merecemos
¿Cómo lograr abundancia en tu vida?
Si partimos de la base de que vivimos en la abundancia, simplemente debemos mejorar algunos aspectos de nuestra forma de pensar para sentirnos abundantes como:
Mejorar nuestra autoestima
Nuestra autoestima o la consideración que tenemos de nosotros mismos, es un aspecto que debemos mejorar para lograr la abundancia. Generalmente la idea que tenemos de nosotros mismos depende de cómo los demás creen que somos.
Walter Riso, psicólogo argentino, nos da algunas claves para mejorar nuestra autoestima:
– Fomenta el autoelogio. No debemos castigarnos con palabras negativas sobre nosotros, sino elogiarnos con palabras positivas. ¡Lo he hecho genial!
– Prémiate. Cuando logres algo positivo en tu vida, prémiate. No es necesario que te premies con cosas caras, si te gustan las golosinas cómpratelas, si te gusta el cine ve de vez en cuando.
– Elimina las creencias represivas que te impiden autoreforzarte. Por ejemplo, el autocontrol de los sentimientos. Es cierto que debemos poner ciertos límites, pero no debemos olvidar disfrutar y sentir, dejando de lado a veces lo racional.
– No te avergüences de tus éxitos y tus esfuerzos. Se trata de autorreconocer nuestros logros, no de recriminarnos.
“Lo importante, entonces, no es ser bello,
si no gustarse a sí mismo.”
(Walter Riso)
Cambiar las creencias limitadoras
Para lograr vivir en la abundancia, es fundamental superar las creencias limitadoras que tenemos programadas.
Para lograr tener abundancia sin esfuerzo y sin sufrimiento, debemos dejar ir para permitir entrar cosas nuevas, no debemos sentir apego por lo que poseemos y no debemos perseguir el dinero o símbolos de riqueza.
Dar las gracias
Es importante ser agradecido en todas las circunstancias de nuestra vida, a sus luces y sus sombras. Pues la gratitud es una de las actitudes más transformadoras del ser humano.
Actuar con desapego
Si pierdo algo puedo pensar en que llegará algo mejor, en que ese hueco que deja lo que he perdido, lo puede llenar otra cosa, otra persona, otra circunstancia.
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