“No encontré, tampoco lo busqué… siempre pensé que hay cosas que suceden y ya está. No encontré a esa persona que le diera la vuelta a mi mundo y que me hiciera pensar que merecía la pena hacer un camino juntos.
Reconozco que hubo intentos… pero se esfumaron como una cortina de humo. Vivo mi soltería con felicidad.
¿Quién tuvo la culpa si es que le podemos poner una palabra y sobre todo, una tan contudente y quizás poco acertada como es la terrible palabra “culpa?…
En estos casos, en estas cosas, quizás no haya culpables, la vida se presenta así sin más. Pero yo me siento feliz; tengo mil proyectos conmigo misma, mil cosas por hacer aún en mi vida. Tengo a mis amigos, a gente que realmente me aprecia y me quiere.
“Es mejor estar sola que infeliz con alguien”
-Marilyn Monroe-
Aunque a estas alturas he visto como todos los de mi entorno han logrado encontrar ese amor e incluso algunos lo han seguido manteniendo a pesar de los años, de la rutina y de las diferencias…
Yo he seguido igual, incluso diría que estancada para algunos… pero eso es problema de ellos, no mío.
Me siento tan plena conmigo mismo que ya no necesito ir buscando como lo hacía cuando era más joven.
Muchas veces incluso me he sentido presionada por la sociedad, que ve en la pareja el estado ideal, lo normal que todos tenemos que hacer llegados a una edad.
Pero a estas alturas yo me pregunto ¿y qué es lo normal? pues seguramente sea lo convencional, lo establecido en las distintas sociedades…
Pero a mi nunca me ha importado lo que los demás puedan pensar o decir de mí a mis espaldas.
A mí, lo que realmente me interesa es mi felicidad, sola o acompañado, pero mi felicidad al fin y al cabo. Por algo no en vano dicen “Mejor solo que mal acompañado, pero mejor acompañado si la compañía lo merece”.
Así es que en esas estoy yo, en disfrutar de la vida tal y como es, en reírme con mis amigos, en disfrutar del sol, del mar, de sentir la suerte que tengo cada día al despertar y comprobar que puedo ver, escuchar, sentir, luchar, divertirme”
Vive la soltería con felicidad y olvídate de estereotipos
- Disfruta con lo que tienes. Si tienes pareja porque no estáis bien, si no la tienes porque no la tienes, ¿no te das cuenta que a veces da igual lo que tengas o no tengas? Tú eres el que no está contento. Revisa bien tu situación y aprende a ser feliz contigo mismo.
- Despréndete de los viejos convencionalismos. La vida ya no es como antes, hay mil fórmulas afortunadamente nuevas. Solteros, casados, parejas que viven juntas, separadas… Lo importante es que tú seas feliz con lo que tienes.
- No idealices la situación de los demás, tampoco la infravalores para sentirte tú mejor.
- No te obsesiones ¿Te has parado a pensar todas las maravillosas cosas que te estás perdiendo y todas las horas que está ocupando tu mente la idea de tener pareja? ¡Olvídate ya! La única persona que siempre estará a tu lado serás tú mismo, así es que ¿Porqué no empiezas a disfrutar de ti?
- Elige a personas especiales para que formen parte de tu vida. Hay personas dentro de nuestra familia con las que sentimos especial afinidad, amigos que encontramos a lo largo del camino que realmente nos aportan mucho. No dejes escapar a ese círculo de personas especiales para ti.
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