En un instante
Para ti
que en un instante
me enseñaste a estar viva,
sin necesidad
de conocer tu rostro
o pensar de que color
eran tus ojos.
Transformaste mis días
con tu alma de artista,
reflejando en tus obras
purezas concebidas.
Recobrar
en mi vida
la sonrisa perdida;
porque al mirarme en ellas
estoy viendo tu vida.
Y saber
que me engaño
sensaciones de niña
que en un intante apenas
me enseñaste a esta viva.
María Cristina Faleroni