Imprescindible para una buena salud física y mental
Cada vez son más los estudios que corroboran que una adecuada práctica de actividad física es altamente beneficiosa tanto para la salud física como para la mental.
Sin embargo, no hay mayor evidencia que experimentarlo en carne propia porque nosotros mismos somos conscientes de que cuando realizamos una actividad física estamos de mejor humor, nuestra mente está menos espesa y nos aporta una gran cantidad de cosas buenas.
Busca asesoramiento
Hay gente que lo tiene muy claro; otra, que probando diferentes actividades, da con ella; aunque hay algunos casos en los que cuesta algo más.
Para este último grupo, antes de la práctica de actividad física e conveniente pedir consejo a un profesional. Por ejemplo, si estás en un gimnasio en el que tienes diferentes actividades (y no quieres probarlas todas), puedes preguntar al monitor/a que es lo que quieres conseguir, cuáles son tus gustos (y que es lo que detestas o lo que nunca harías, si es que hay algo), si tienes alguna lesión o problema de salud, etc. y déjate aconsejar.
Después de probarlo, se tú mismo el que decida seguir con ello o buscar otra cosa. Aunque todo requiere una constancia y un trabajo. Por ello, no desistas a los 3 primeros días, experimenta 2 semanas (a no ser que haya algún movimiento o ejercicio que te produzca dolor) y a ver qué tal.
Los primeros días son duros, pues nos salen agujetas, experimentamos sensaciones que nunca antes habíamos experimentado, puede que nos sintamos más "débiles", etc.
Un deporte en el que disfrutes
Como ya hemos comentado anteriormente, busca algo que realmente te haga sentirte bien y cómodo. No tienes por qué seguir las modas. Y, gracias al cielo, tienes un sinfín de actividades físicas entre las que escoger: baile, aerobic, tonificación, natación, yoga, Pilates, etc.
Si eliges una práctica de actividad física que realmente te guste y te motive, te será mucho más fácil ser constante y progresar.
Aspectos a trabajar
- Capacidad respiratoria. En toda práctica de actividad física trabajarás, de una u otra manera, la respiración para poder obtener más beneficios. Ello, a su vez, te hará ganar capacidad respiratoria. Es gracias a algunas actividades, como por ejemplo el yoga, en las que aprendemos a respirar correctamente. La respiración es una de las cosas más importantes que repercuten en nuestra salud, pero, todavía hoy es bastante desconocida por la mayoría de personas.
- Resistencia física y mental, Practicar una actividad física, de forma constante y prolongada, nos hace ganar resistencia y fortaleza, tanto física como mental.
Además, el deporte que practicamos requiere una concentración en lo que estamos haciendo. Ello hace que nuestra mente se centre propiamente en la acción y en la respiración, es decir, en "el aquí y el ahora" y dejemos de pensar en el trabajo, en la discusión que tuve con aquel amigo, etc. - Flexibilidad. Al igual que la anterior, ganamos flexibilidad, tanto mental ( nos hacemos más tolerantes, y estamos más "abiertos" al resto de opiniones) como física.
- Relajación final (estiramientos y recuperación de la respiración). Toda práctica de actividad física necesita un trabajo de estiramientos y de respiración. De hecho, se debería estirar al principio y al final, pero en muchos casos la gente se lo salta por "no tener tiempo". Esto es un error, ya que los estiramientos, así como la respiración, son realmente importantes.
- La respiración debe trabajarse y saber en cada momento como se debe hacer. Por ejemplo, es muy diferente la respiración de Pilates a la del Yoga. Hay que tener en cuenta, en que momento debo inspirar y en cual exhalar, si debo hacerlo por la nariz, etc. ya que repercutirá de manera relevante en el rendimiento del ejercicio.
Aprovecha cualquier ocasión (subir escaleras, pasear, ir en bici, etc.)
Para mí, cualquier ocasión se convierte en excusa para moverme: utilizar las escaleras, en lugar del ascensor; mover mis pies al ritmo de la música de fondo, mientras tomo una caña con una amiga; a pasear a la salida de una clase, cambiando mi itinerario de siempre; a pasear en bici por el paseo marítimo…
¡Aprovecha cualquier ocasión que puedas para movilizar ese cuerpo que la madre naturaleza te ha dado! Porque el movimiento es vida!
Intenta que la práctica de actividad física sea algo habitual en tu vida