Triglicéridos ¿Energía de reserva o bomba de relojería?
Los triglicéridos se producen a través de la alimentación (aceites y grasas) o pueden ser producidos por nuestro hígado transformando el exceso de hidratos de carbono y calorías en grasas.
Los triglicéridos altos conllevan un riesgo cardiovascular especialmente cuando además hay también niveles altos de colesterol o hay un desequilibrio entre el colesterol “malo” y el colesterol “bueno”.
Triglicéridos y alimentación
- En primer lugar hay que adoptar una dieta pobre en grasas (eliminar la grasa de la carne) Estas serán especialmente Omega 3 que se encuentra especialmente en el pescado azul (salmón, sardinas, caballa) y en aceites vegetales como el aceite de linaza, el de girasol o el de soja (soya) siempre que sean SIN REFINAR y de PRIMERA PRESIÓN en frío.
- Si tomamos alimentos lácteos (leche, queso, yogur…) buscaremos que sean bajos en grasa o desnatados. Buscad alternativas en la soja.
- El exceso de azúcar, miel, zumos de frutas con azúcar añadido, la bollería industrial y el exceso de pan o cereales también pueden ocasionar que nuestro cuerpo transforme ese exceso de azúcares en triglicéridos. Cereales, pasta y pan deberían de ser integrales ya que la fibra dificulta la absorción de grasas y azúcares.
- Comer más legumbres en vez de carnes rojas o embutidos.
- Tomar un ajo crudo al día (también se consigue en cápsulas o comprimidos) también puede disminuir los triglicéridos entre un 10 y un 15 %.
- Evitar el consumo de alcohol.
Plantas medicinales, complementos dietéticos y triglicéridos
- La alcachofera (hojas): ayuda a disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos. Favorece la producción de bilis. Se puede tomar en forma de infusión aunque debido a que es muy amarga la mayoría de las personas la combinan con otras plantas como la Menta Piperita (de las pocas plantas hepáticas que tiene buen sabor) Otra opción sería tomarla en forma de gotas o cápsulas (de venta en farmacias y herbolarios)
- La cúrcuma: es una especia ideal en estos casos ya que además de ser ideal para combatir el colesterol también favorece el control del nivel de azúcar o glucosa en sangre (importantísimo para no metabolizar su exceso en forma de triglicéridos) Se puede añadir a los alimentos o tomar en forma de tableta.
- Las semillas de lino (linaza): ayuda de varias maneras, es rica en ácidos grasos Omega 3, favorece el aumento del colesterol bueno, rico en fibra (dificulta absorción de grasas y azúcares) y tiene un efecto saciante que ayuda a comer un poco menos a las personas que necesitan perder peso.
- La lecitina de soja (soya): emulsiona (infla) las grasas del torrente sanguíneo y favorece su posterior eliminación del cuerpo. Puede ayudar, en cambio, a aumentar el colesterol (HDL) Se consigue en diferentes formatos (granulado, perlas y cápsulas).
Ejercicio físico y triglicéridos
Para bajar los niveles de triglicéridos no es obligatorio apuntarse a un gimnasio ya que está comprobado que el ejercicio suave pero prolongado es el más eficaz. Caminar un mínimo de 40 minutos diarios (podemos aprovechar para ir al trabajo a pié o dejaremos el automóvil a 20 minutos del trabajo) o ir en bicicleta son ejercicios que favorecen una buena oxigenación y nos ayudan a la vez a disminuir nuestros niveles de estrés (otro factor relacionado con todos los problemas cardiovasculares).