Definición y síntomas del Lupus Eritematoso Sistémico
Es una enfermedad de las llamadas autoinmunes (nuestro sistema inmune se equivoca y ataca a partes de nuestro propio organismo) y que ocasiona lesiones en la piel y en otros tejidos. Lupus significa lobo (en latín), eritematoso significa enrojecido y sistémico que puede afectar a culaquier parte del cuerpo. El Lupus Eritematoso Sistémico es a la vez una enfermedad inflamatoria crónica que cursa con brotes o empeoramientos.
Suele afectar más las mujeres y empieza entre los 15 y 30 años.
Hay que destacar el Lupus Eritematoso Discoide que es menos grave ya que sólo tiende a afectar a la piel y el Lupus Eritematoso Sistémico que puede afectar también a los órganos internos y complicaciones muy serias.
Así pues los síntomas pueden abarcar desde enrojecimiento e inflamación de zonas de la piel, a problemas renales, inflamación de ganglios, pleuresía, alopecia en zonas afectadas, fiebre, cansancio, etc.
Como en otras enfermedades autoinmunes el Lupus eritematoso Sistémico también tiende a complicarse con otras enfermedades autoinmunes como la Artritis, Dermatitis o Esclerósis Múltiple.
Etiología o causas del Lupus eritematoso Sistémico
Se desconocen las causas específicas del Lupus eritematoso Sistémico y por ello se habla de una enfermedad genética o hereditaria. Si que están más claros los factores que pueden ocasionar los brotes: el estrés, virus, exceso de exposición al sol, algunos medicamentos, etc.
Estrés, emociones y Lupus eritematoso
El estrés y mal manejo de las emociones suelen empeorar el Lupus eritematoso Sistémico. En el caso del Lupus una recomendación básica es buscar remedios o terapias naturales que nos ayuden a disminuir nuestro estrés. Técnicas de relajación, Yoga, meditación, tai-chi, etc. La verdad es que cualquier afición o hobby que nos ayude a “desconectar” de nuestros problemas o a encararlos de forma diferente será más eficaz en la lucha contra el Lupus eritematoso Sistémico que la mayoría de medicamentos.
No olvideis las Flores de Bach, lecturas de autoayuda o cualquier tipo de psicoterapia que pueda ayudar a sanar nuestras emociones.
Nutrición y Lupus eritematoso Sistémico
Deberíamos evitar, en lo posible, todo tipo de aditivos alimentarios ya que nuestro sistema inmune ya está bastante alterado. El azúcar blanco debería ser sustituido por otros endulzantes naturales como la melaza, azúcar de caña sin refinar, agave, miel, etc.
Aumentar el consumo de frutas y verduras ya que su efecto antioxidante siempre benefia el estado general del organismo.
El pescado azul y en general el Omega 3 (aceite de lino o linaza, aceite de soja o soya, aceite de germen de trigo, etc.) tienen un efecto antiinflamatorio muy potente. Aceites como el de Onagra o Prímula y Borraja también serán remedios naturales de gran ayuda. Los ácidos grasos esenciales son cada vez más valorados para mejorar problemas de piel, como el del Lupus Eritematoso Sistémico, inflamaciones crónicas y del sistema nervioso.
Evitaremos también el café, las colas, el alcohol y todas aquellas bebidas excitantes ya que el estrés suele ser un factor que agrava la mayoría de enfermedades.
Hacer cuatro o cinco comidas al día y vigilar el estrés son básicos en cualquier enfermedad pero aún más en las enfermedades autoinmunes ya que la resistencia a la insulina es uno de los factores clave que hay que regular.
Un zumo o jugo, en ayunas, de zanahoria, apio y una cucharada mediana de aceite de lino o linaza sería un modo genial de empezar el día ya que nutre y depura a la vez nuestro organismo.
Alergias y Lupus Eritematoso Sistémico
El sistema inmunológico, según la medicina natural o naturista, suele alterarse como consecuencia de su reacción a algo. Deberíamos evitar en lo posible toda una serie de factores que pudieran ser sospechosos de estar afectando a nuestro sistema inmune:
- Cambiar la leche de vaca por otra de origen vegetal (almendra, soja o soya, avena, arroz, etc.) Por supuesto que también se puede ser alérgico a alguna de las leches vegetales pero en general es muy poco habitual.
- Ver si tenemos alguna alergia alimentaria (tratad de ver si hay algún brote como consecuencia de tomar o abusar de algún alimento).
- Eliminar los empastes dentales de amalgamas de mercurio.
- Intentar ponerse sólo las vacunas estrictamente imprescindibles.
- Cuidado con el abuso de medicamentos.
- Evitad ponerse tatuajes muy grandes o de colores (son a base de tintes muy agresivos).
- Sólo aplicarse tintes naturales para el cabello (los normales levan muchos productos químicos).
Podría ser interesante, en caso de Lupus eritematoso Sistémico, hacerse algúna analítica para detectar Alergias alimentarias y presencia de metales pesados.
Lupus Eritematoso Sistémico y fitoterapia
- En todos los problemas de piel es básico que nuestro organismo pueda deshacerse de las toxinas fácilmente y por ello es indispensable evitar el estreñimiento. Plantas como la flor de Malva, las semillas de lino, de Zaragatona tienen un suave efecto laxante.
- El Hígado según la medicina naturista suele estar detrás de la mayoría de los problemas de piel así que no estará de más tomar alguna infusión a base de Alcachofa, Boldo, Cardo Mariano, Diente de león, etc.
- Hay plantas medicinales que pueden ayudarnos ante infecciones sin alterar nuestro ya alterado sistema inmune (Uña de gato, Ajo, etc.) El Própolis o propoleo y el Aloe vera también suele ayudarnos cuando buscamos fortalecer el organismo.
- Como antiinflamatorios naturales nunca hay que olvidar al jengibre y al harpagofito.
- Si el estrés es uno de los factores clave en el lupus Eritematoso Sistémico recordemos el beneficio de la Melisa o de la Avena Silvestre.
- Cuando una herida o llaga no cicatriza o puede infectarse podemos aplicar la Sangre de Drago (líquido viscoso que se obtiene de este árbol del Amazonas).
Terapias para el Lupus Eritematoso Sistémico
En caso de Lupus Eritematoso Sistémico la Homeopatía y la Acupuntura son dos de las terapias más eficaces ya que tienden a requilibrar en su totalidad al paciente.
Por último decir que no hemos de quedarnos sólo en la piel de la persona sino mirar de sanarla en su totalidad buscando cambiar aquelos malos hábitos de alimentación y sobre todo disminuyendo su nivel de estrés.