El 24 de noviembre de 1859 se publicó en Londres la obra “El origen de las Especies” de Darwin, la publicación científica más importante de la era moderna. Esta obra estableció una ruptura clara entre el oscurantismo precedente en la investigación médica y la posterior apertura de infinitas posibilidades de comprensión tanto de la biología, fisiología y psicología humana.
Su obra aún es entendida de forma controvertida y es atacada por diversos fundamentalistas. A través de ella han surgido varias teorías explicativas a veces contradictorias; aunque nada de esto ensombrece el gran hecho incontestable que Darwin puso sobre la mesa: Somos evolución.
Vamos a repasar su importancia y lo analizaremos desde una perspectiva existencial. Quizás la ciencia tiene mucho más que decirte de lo que crees acerca del sentido de tu vida. No suena muy místico, pero es efectivo, riguroso y fiable….como lo fue Darwin.
Genial naturista, Darwin sigue siendo tan importante hoy en día porque su obra supone un antes y un después en nuestro entendimiento del ser humano. Da sentido a la biología y la psicología, proporcionando respuestas a preguntas tan importantes cómo: ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? y ¿Hacia dónde vamos?.
Darwin da una explicación que en siglos anteriores ninguna disciplina pudo dar, causando gran revuelo especialmente entre algunos ambientes académicos de alta rectitud moral a los que su teoría les parecía una auténtica blasfemia. Darwin afirmó con una teoría que no somos producto de la creación divina sino de la evolución de las especies, gracias a la selección natural que se da en ellas por su ajuste a las demandas del medio… fue un ESCÁNDALO.
Aportaciones de Darwin
Darwin tiene dos aportaciones básicas: el concepto de evolución y la explicación de la historia universal que ya habían intentado hacer Copérnico, Galileo, Newton y tantos otros expulsando al factor divino de este proceso. Ya no hace falta este origen religioso para crear las especies: las especies se forman solas a través de la evolución mediante el mecanismo de la selección natural.
Plantear esto no significa que seamos animales, sino animales capaces de hacer cosas virtuosas, como intuir la existencia de ondas gravitacionales y comprobar su existencia décadas después. Así, cuando Darwin plateó esta revolución las religiones se pusieron en guardia temiendo que la ciencia pudiera dar una explicación a lo que antes solamente era entendible mediante relatos.
Darwin no quiso dar propaganda a sus teorías sobre la evolución de las especies ya que suponía una contradicción con lo que respiraba en la sociedad en la que vivía e incluso dentro de su propia familia. Esta era creyente practicante y no imaginaba las consecuencias que podría tener el hecho de publicar sus descubrimientos y su interpretación.
Pero su viaje durante 5 años por el mundo y su observación pormenorizada de los ejemplares de distintos animales, junto a su compromiso con la ciencia, no le impidió escribir sus conclusiones.
El vacío existencial que nos dejó Darwin, ¿verdad u oportunidad?
Es muy duro pensar que no somos una creación única del universo y que a nuestra llegada nada estaba preparado ni sincronizado para ello. Darwin nos dio una teoría de la evolución pero también empequeñeció nuestros delirios de grandeza de ser imprescindibles y especiales.
Es cierto que le quitó esa sensación a gran parte humanidad, pero por el contrario nos dio mucha más importancia que cualquier teoría o explicación del mundo había hecho antes:
Eres uno más en esta cadena de la evolución humana, pero según lo que hagas puedes transformar esa cadena y ser especial en ella. Da igual de dónde vengas, lo importante es lo que tú haces en el medio.Compartir
Esto no solo lo dijo Darwin, sino que lo confirmó también Lamarck : “Las especies que consiguen grandes logros, pasarán esas enseñanzas a sus descendientes mejorando las que ya existían”. Por tanto, no eres una copia más al servicio de fuerzas ajenas a ti, eres tú mismo el que puede generar sus funciones y dejarlas como una mejor herencia.
En este sentido, el evolucionismo no deja de ser puro existencialismo, pues nos dice que el hombre se va haciendo conforme vive y conforme las metas que persiga. El evolucionismo por tanto nos da ya dos concepciones metafísicas de nuestra existencia: nos considera importantes para la existencia y considera la que el hombre busca ser virtuoso respecto a cualquier otra especie.
Fuentes consultadas para el artículo : “Charla informativa sobre Darwin en la UAL”