Sucedio
No podemos estar en el presente añorando
el pasado.
Ni siquiera preguntándonos por qué.
Lo que sucedió, sucedió, y hay que soltar,
hay que desprenderse.
No podemos ser niños eternos, ni adolescentes
tardíos, ni empleados de empresas inexistentes,
ni tener vínculos con quien no quiere estar
vinculado a nosotros.
No. ¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir!
Por eso a veces es tan importante destruir
recuerdos, regalar presentes, cambiar de casa,
documentos por tirar, libros por
vender o regalar.
Los cambios externos pueden simbolizar
procesos interiores de superación.
Dejar ir, soltar, desprenderse.
En la vida nadie juega con las cartas
marcadas, y hay que aprender a perder
y a ganar.
Hay que dejar ir, hay que pasar la hoja,
hay que vivir con sólo lo que tenemos en
el presente! El pasado ya pasó.
Aporte de: el poema.