Juan "el Perote" me preguntó con curiosidad, en su ya desaparecido bar Tómate algo "Y por que te has venido a vivir aquí?",mis explicaciones de por que había elegido la preciosa, rica en manantiales y huertas, sinuosa con cuestas imposibles, fuentes de agua pura refrigerante, hicieron que desde entonces tengamos una cariñosa amistad.
Normalmente hablo con pasión de las cosas, lo he heredado de mi abuelo(gracias abuelete) y mi pasión y argumentos le convencieron de que Casarabonela era y es uno de los mejores sitios para vivir, bajo mi punto de vista claro. Un pueblo donde casi todos nos conocemos, la humanidad que es dificil de discernir en las grandes urbes, aquí se respira cada minuto, nos saludamos por la calle, nos ayudamos en todo y en especial a mi me han tratado y me tratan como de una forma por la cual deberé estar agradecido toda mi vida.
Su sierra y su naturaleza, sus barecitos y rincones, su apoteósica iglesia, su dominio visual, que enaltece el alma, del valle del Guadalhorce, su aire puro, la convierte en el auténtico pueblo blanco andaluz, mirando al este, con el sol saliendo de cara y ocultándose a su espalda en la sierra Prieta. Sus arroyos fuidos y ruidosos en invierno y tranquilos y refrescantes en verano.
Casarabonela.
"Empotrado en la montaña,
preñado de su blancura,
yace un pueblo morisco,
sus aguas son de dulzura,
cristalina y cantarina,
como el canto del jilguero,
que compiten en belleza,
como su frondosa sierra
y su fruta ya madura,
para ser la melodía,
que te adorne el respirar,
un aire de tal pureza,
que te hace enamorar.
Un nombre romano y moro,
como es mi Andalucía,
que nunca pierda la esencia,
que este pueblo mantiene,
costumbres y tradiciones,
que son verdad de la vida,
identidad milenaria
la seriedad de su gente,
serrana, morisca y dura
es donde mi amor anida "
Escrito por Ricardo Texidó. Lunes 16 de enero de 2012. 12 del mediodia. Mañana de lluvia.