Brasil genuflexo ante EEUU: sigue ignorando su tradición diplomática, ahora con Cuba

"Si uno mira lo que es la tradición diplomática brasileña esto sería una sorpresa, pero con el canciller actual de Brasil, Ernesto Araújo, y los pasos de este país en escala internacional desde que asumió el poder el presidente, Jair Bolsonaro, no se podía esperar otra cosa", explicó el brasileño Mendonça, que también es docente de la Universidad Federal de Ceará.

Desde 1992, la mayoría de los países del mundo han apoyado a Cuba y la resolución que cada año el Gobierno cubano presenta ante la Asamblea General de Naciones Unidas exigiendo el fin del bloqueo. Por primera vez en ese histórico proceso, la diplomacia brasileña cambió de bando y decidió mantener su alineamiento a las políticas de EEUU.

Por ello, a juicio de Mendonça, el voto de Brasil es una continuidad de lo que Bolsonaro viene haciendo. "EEUU e Israel, son los dos países de los cuáles más habla siempre el presidente y se suscribe a sus políticas sin importar cuáles son las posiciones históricas de Brasil en la diplomacia", resumió.

Mendonça recordó cómo desde el principio de su mandato, Bolsonaro prometió que esa alineación con EEUU sería provechosa desde muchos aspectos para los brasileños, "pero hasta ahora no ha habido ningún beneficio concreto". 

"EEUU mantiene el veto a la importación de carne vacuna brasileña, tampoco hay señales de facilitación de las visas a brasileños pese a que los estadounidenses ya no precisen visas para entrar a Brasil. Sobre la sección de la base militar de Alcántara todavía no se ha dado ningún cambio, ninguna oferta verdadera y Brasil sigue sin ser miembro de OCDE…", señaló el politólogo. 

También destacó que la decisión brasileña contra Cuba en la ONU es algo que va a contribuir mucho más al aislamiento del gigante suramericano en la región. 

"Bolsonaro se ha metido en las elecciones de Argentina cuando perdió Macri, se entrometió en la elección uruguaya de cara a la segunda vuelta, y sigue comprometiendo toda la democracia entrometiéndose en la políticas locales", destacó Mendonca.

El canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla destacó minutos antes de la votación que "el bloqueo provoca daños humanitarios incalculables, constituye una violación flagrante, masiva y sistemática de los derechos humanos y califica como acto de genocidio".