El portero que sufrió la 'mano de Dios' y el 'Gol del Siglo': "Maradona es el mejor jugador de la historia, pero no lo respeto"

El histórico portero de la selección inglesa de fútbol, Peter Shilton, continúa ostentando el récord del jugador con más participaciones para su país luego de 30 años desde su última aparición con esa camiseta. Y aunque este es solo uno de sus muchos logros deportivos, el guardameta aún sigue siendo recordado por uno de los episodios más desafortunados de su carrera: la famosa 'mano de Dios', el gol que Diego Armando Maradona le anotó ayudándose con la mano en el Mundial de México 1986.

En una entrevista al diario The Guardian publicada esta semana, Shilton confesó que sigue sin perdonar al astro argentino después de más de tres décadas de la polémica jugada porque nunca pidió perdón. "[Maradona] lo admitió de manera indirecta, diciendo que era 'la mano de Dios', pero no se disculpó ni mostró ningún remordimiento", señala.

El británico asegura que siempre fue enseñado a "respetar el juego" y ha visto a otros jugadores "hacer trampa, admitirlo y disculparse", pero, por el contrario, el mítico 10 de la Albiceleste ha demostrado antipatía. Shilton reveló que hace unos años le ofrecieron aparecer junto al Pelusa en un programa, pero rechazó la invitación porque creía firmemente que "no se disculparía". "No le daré la mano ni lo reconoceré", subrayó.

El arquero estima que Maradona "es el mejor jugador de la historia", pero deja en claro que no le respeta "como deportista" y "nunca" lo hará.

El 'Gol del Siglo': "No estábamos de ánimo" 

Shilton habló también del 'Gol del Siglo', también de Maradona, con el que Argentina venció a los ingleses por 2-1 en aquel inolvidable partido de cuartos de final de México 86.

El portero inglés reconoce que fue una jugada "típica" de Diego, en la que demostró lo que era "capaz de hacer". Sin embargo, y sin demeritar la gran habilidad que exhibió el argentino —eludiendo a seis contrarios—, afirmó: "No estábamos en el estado de ánimo correcto después de lo que sucedió [la 'mano de Dios']. Cuando sabes que alguien está haciendo trampa en un gran partido como ese, tu estómago cae. Así que no estábamos muy en sintonía con nuestra defensa".

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