Después de amarte, No podria amar a nadie más. ¿Qué me importa si el esntão llena de calles de los hombres, prodigando belleza y promesas para llegar a la mano. Si ya no me quieres, Es profunda e irremediable mi soledad. Era tan fácil ser feliz cuando estabas conmigo. ¿Cuántas veces he oído tu risa, ríe feliz Como un sonajero en la boca. Y todo el tiempo sin besarte, que te estoy besando; Con las manos, los ojos, el pensamiento una ansiedad loca. Pablo Neruda