Trenes repletos rodaron
huyendo de la miseria,
gente extremeña emigrando
arrancados de su tierra,
con sus maletas cargados
dejando atrás mucha huella.
Trenes lentos sobre el hierro
de las vías sobre las piedras,
arrastrando las ilusiones
hacia tierras europeas,
hacia tierra desconocida,
hacia toda España entera.
Trenes que no regresaron
nuevas raíces se echan,
solo muy pocos lograron
volver de nuevo a su tierra,
muchos no le queda nada
otros muy pequeños eran.
Extremeños por el mundo
encontraras donde quieras,
por los cinco continentes
algun extremeño encuentras,
atrás quedaron recuerdos
que no los borra cualquiera.
Atrás quedaron rincones
alegrías, pena y tristeza,
los recuerdos de la infancia
de los años de inocencia,
algunos hasta la novia
otros volvieron por ella.
Otros dejaron lugares
gravados en sus cabezas,
cenizas que no se apagan
y en su nostalgia recuerdan,
rincones de Extremadura
¡ cuantos regresar quisieran¡
Cuantos regresan un día
por descansar en su tierra,
esa tierra que les dio vida
y que regresan a ella,
cuando el ocaso te obliga,
cuando el descanso te llega.