HABLA CLARAMENTE!
"...vuestro sí sea sí, y vuestro no sea no, para que no caigáis en condenación." (Santiago 5:12)
Para algunos de nosotros, la palabra más difícil de decir es: "No". Es muy fácil pronunciarla, pero cuesta mucho manifestar, especialmente si has sido criado en la creencia que buenos cristianos, padres responsables, esposas sufridas y los trabajadores consagrados nunca dicen: "No".
Nos sentimos culpables cuando lo decimos. Nos preocupa que no gustemos a los demás. Bueno, ¿sabes qué? A algunos no les agradamos. Jesús dijo: "Si el mundo os odia, recordad que Me odió a Mí primero" (Juan 15:18).
La verdad es que la única forma de evitar que te critiquen es decir lo que todo el mundo quiere oír. Pero eso te convierte en un falso profeta.
Cuando alguien continúa abusando de tu buena voluntad, y todo lo que dices de palabra o de hecho es que no te importa, no estás diciendo la verdad. ¡No está bien! ¡Sí te importa! ¡Estás viviendo una mentira! Sí, la gente habla bien de ti, pero si está estropeando tu vida, ¡el precio de su aceptación es demasiado alto!
Cada vez que dices: "Sí", cuando en realidad quieres decir: "No", tres cosas, no demasiado buenas, te ocurren:
1) Pierdes respeto por ti mismo.
2) Acumulas ira dentro de ti, y a menudo la descargas sobre aquellos
que no la merecen.
3) Bloqueas tus sentimientos, te deprimes, y te aíslas.
¡Renuncia a vivir de esa forma otro día más!
Escucha las palabras del Señor; di solamente un simple: "Sí", o un "No", para que no peques (Santiago 5:12)
NO LE DIGAS A DIOS CUAN GRANDE ES TU PROBLEMA......
DILE A TU PROBLEMA CUAN GRANDE ES TU DIOS!!!!!!!