...Que una dulce lluvia de alegria os inunde siempre,
Jardines infinitos
de Feli Gonzalez
Sembraré en mi huerto
nuevas flores.
Planteré los rosales
del invierno y, de nuevo,
volverán aquellas mariposas
a besar el cáliz de mis rosas.
Se abrirán las pequeñas campanillas,
repicando mi alma de alegría.
Brotarán los nardos y
las suaves azucenas
despertando a las dulces violetas.
Volverán de nuevo,
aquellas golondrinas
a posarse en mi balcón;
pero tú no volverás,
pues, caminas
por jardines de otra vida.
Tu misión se terminó
en este mundo y ahora
eres viento y espíritu
de jardines infinitos