Perteneciendo al mundo
Los guerreros de la luz mantienen el brillo en los ojos.
Están en el mundo, forman parte de la vida de otras personas,
y comenzaron su jornada sin alforja y sin sandalias.
Muchas veces son cobardes.
No siempre actúan correctamente.
Los guerreros de la luz sufren por cosas inútiles,
tienen actitudes mezquinas y a veces se consideran incapaces de crecer.
Frecuentemente se consideran indignos de cualquier bendición o milagro.
Los guerreros de la luz no siempre tienen la certeza
de qué están haciendo aquí.
Muchas veces pasan noches en vela,
pensando que sus vidas no tienen sentido.
Por eso son guerreros de la luz.
Porque se equivocan.
Porque se preguntan.
Porque buscan una razón
y con seguridad terminarán... encontrándola.
Paulo Coelho