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General: SANTORAL DEL DIA 1 ENERO
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Respuesta  Mensaje 1 de 3 en el tema 
De: Vampiresa  (Mensaje original) Enviado: 01/01/2010 13:01
1 ENERO
Solemnidad de Santa María Madre de Dios

Octava de la Navidad (Manuel, Jesús)

Santos: Agripino, Frodoberto, Justino, obispos; Almaquio, Concordio, mártires; Beatriz, Eufrosina, vírgenes; Martina, virgen y mártir; Fulgencio de Ruspe, Ponfilio, Vicente María Strambi, confesor; Odilón, Guillermo abades.

1 de enero

Santa María, Madre de Dios

Es el mejor de los comienzos posibles para el santoral. Abrir el año con la solemnidad de la Maternidad divina de María es el mejor principio como es también el mejor colofón. Ella está a la cabeza de todos los santos, es la mayor, la llena de Gracia por la bondad, sabiduría, amor y poder de Dios; ella es el culmen de toda posible fidelidad a Dios, amor humano en plenitud. No extraña el calificativo superlativo de "santísima" del pueblo entero cristiano y es que no hay en la lengua mayor potencia de expresión. Madre de Dios y también nuestra... y siempre atendida su oración.

Los evangelios hablan de ella una quincena de veces, depende del cómputo que se haga dentro de un mismo pasaje, señalando una vez o más.

El resumen de su vida entre nosotros es breve y humilde: vive en Nazaret, allá en Galilea, donde concibió por obra del Espíritu Santo a Jesús y se desposó con José.

Visita a su parienta Isabel, la madre del futuro Precursor, cuando está embarazada de modo imprevisto y milagroso de seis meses; con ella convive, ayudando, e intercambiando diálogos místicos agradecidos la temporada que va hasta el nacimiento de Juan.

Por el edicto del César, se traslada a Belén la cuna de los mayores, para empadronarse y estar incluida en el censo junto con su esposo. La Providencia hizo que en ese entonces naciera el Salvador, dándolo a luz a las afueras del pueblo en la soledad, pobreza, y desconocimiento de los hombres. Su hijo es el Verbo encarnado, la Segunda Persona de Dios que ha tomado carne y alma humana.

Después vino la Presentación y la Purificación en el Templo.

También la huída a Egipto para buscar refugio, porque Herodes pretendía matar al Niño después de la visita de los magos.

Vuelta la normalidad con la muerte de Herodes, se produce el regreso; la familia se instala en Nazaret donde ya no hay nada extraordinario, excepción hecha de la peregrinación a Jerusalén en la que se pierde Jesús, cuando tenía doce años, hasta que José y María le encontraron entre los doctores, al cabo de tres días de angustiosa búsqueda.

Ya, en la etapa de la "vida pública" de Jesús, María aparece siguiendo los movimientos de su hijo con frecuencia: en Caná, saca el primer milagro; alguna vez no se le puede aproximar por la muchedumbre o gentío.

En el Calvario, al llegar la hora impresionante de la redención por medio del cruentísimo sufrimiento, está presente junto a la cruz donde padece, se entrega y muere el universal salvador que es su hijo y su Dios.

Finalmente, está con sus nuevos hijos _que estuvieron presentes en la Ascensión_ en el "piso de arriba" donde se hizo presente el Espíritu Santo enviado, el Paráclito prometido, en la fiesta de Pentecostés.

Con la lógica desprendida del evangelio y avalada por la tradición, vivió luego con Juan, el discípulo más joven, hasta que murió o no murió, en Éfeso o en Jerusalén, y pasó al Cielo de modo perfecto, definitivo y cabal por el querer justo de Dios que quiso glorificarla.

Dio a su hijo lo que cualquier madre da: el cuerpo, que en su caso era por concepción milagrosa y virginal. El alma humana, espiritual e inmortal, la crea y da Dios en cada concepción para que el hombre engendrado sea distinto y más que el animal. La divinidad, lógico, no nace por su eternidad.

El sujeto nacido en Belén es peculiar. Al tiempo que es Dios, es hombre. Alta teología clasifica lo irrepetible de su ser, afirmando dos naturalezas en única personalidad. El Dios infinito, invisible, inmenso, omnipotente en su naturaleza es ahora pequeño, visible, tan limitado que necesita atención. Lo invisible de Dios se hace visible en Jesús, lo eterno de Dios entra con Jesús en la temporalidad, lo inaccesible de Dios es ya próximo en la humanidad, la infinitud de Dios se hace limitación en la pequeñez, la sabiduría sin límite de Dios es torpeza en el gemido humano del bebé Jesús y la omnipotencia es ahora necesidad.

María es madre, amor, servicio, fidelidad, alegría, santidad, pureza. La Madre de Dios contempla en sus brazos la belleza, la bondad, la verdad con gozoso asombro y en la certeza del impenetrable misterio.



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Respuesta  Mensaje 2 de 3 en el tema 
De: Paqui Enviado: 01/01/2010 22:42

 

 DOY GRACIAS A DIOS POR TENERTE

A NUESTRO LADO Y POR SENTIRME

UNA PERSONA MUY IMPORTANTE

 CONTANDO CON TU AMISTAD

 

DIOS TE BENDIGA POR TUS

 HERMOSOS APORTES

TE QUIERO TAL CÓMO ERES

¿QUIERES HACERME UN FAVOR?

¡¡¡SIGUE ASÍ!!!

*************

 

CARIÑOOO ESPERO DE TODO

CORAZÓN QUE EL AÑO QUE

HA ENTRADO TRAIGA A TI

Y A LOS TUYOS LO MEJOR

SOBRE TODO SALUD Y TRABAJO

Y QUE NUESTRA AMISTAD

SEA BENDECIDA POR DIOS

POR SIEMPRE TE QUIERO MUCHO

MI NIÑA

 

 

 


Respuesta  Mensaje 3 de 3 en el tema 
De: campitos0 Enviado: 02/01/2010 00:23

«Salve, Señora, santa Reina, santa Madre de Dios, María, que eres Virgen hecha Iglesia y elegida por el santísimo Padre del cielo, a la cual consagró Él con su santísimo amado Hijo y el Espíritu Santo Paráclito, en la cual estuvo y está toda la plenitud de la gracia y todo bien» (San Francisco, Saludo a la B.V. María).

«Santa Virgen María, no ha nacido en el mundo ninguna semejante a ti entre las mujeres, hija y esclava del altísimo y sumo Rey, el Padre celestial, Madre de nuestro santísimo Señor Jesucristo, esposa del Espíritu Santo: ruega por nosotros... ante tu santísimo amado Hijo, Señor y maestro» (San Francisco, Antífona del Oficio de la Pasión).

María, Madre de Dios, ayúdanos y protégenos en este Nuevo Año 2010.

Gracias.

Celia



 
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