De corazón a corazón
Te extraño
como dos gotas de agua
separadas por la tempestad
vagamos por el mundo
en busca de nuestra otra mitad
y nos duele el descubrirnos
en medio de tanta ausencia.
Paciencia.
Te necesito.
Dulces sueños compartidos
suaves caricias etereas.
Anhelos, esperanzas, pensamiento.
Tempestad, naufragio, sufrimiento.
Porque te siento como al viento
aunque te halles ausente
te tengo en mi mente
presente.
Te adoro
Porque desbordaste en mi un caudal de amor
que no soñe siquiera poseer.
Siento tu dulce alma tan cercana a mi.
Cierro los ojos y veo
tu sonrisa de cielo
y tus ojos de sol...
Te amo.
Solcito
Buenos Aires, 25 de Marzo de 1998