Ámame cuando menos lo merezca, ya que es cuando más lo necesito.
Santos del día 30 de abril
Pío V papa; Eutropio, Donato, Erconvaldo, Pulcronio, Quirino, Silvio y Cirilo obispos; Máximo, Pedro y Luis mártires; Lupino, Sabina y José Benito Cottolengo confesores; Amador, Afrodisio y Lorenzo presbíteros; Genesto monje; Sofía virgen y mártir. PÍO
El adjetivo latino Pius es el que da origen a este nombre propio. Se refiere a la que para los romanos era la más noble y esencial de las virtudes humanas, la pietas, que no podemos traducir simplemente por "piedad", porque al pasar este término a las lenguas románicas se redujo su significado para referirlo sólo al cumplimiento de los deberes religiosos, cuando en latín se refería también al cumplimiento de los deberes de los hijos con los padres y de los padres con los hijos. La pietas era para los romanos el gran cimiento de la conducta. Pius es el apelativo que le da Virgilio al heroico fundador del pueblo romano en la Eneida: Pius Aeneas. Y nos lo representa como hijo solícito de su anciano padre, padre amantísimo de su hijo y fiel cumplidor de sus deberes para con los dioses. Los que llevan este nombre celebran su onomástica el 30 de abril (S. Pío V), el 11 de julio (S. Pío I) o el 21 de agosto -antes, el 3 de septiembre- (S. Pío X). Un nombre que ha hecho grande también, como apellido, la noble dinastía italiana de los Pío. La historia habla elocuentemente en favor de este nombre.