


"Ahora que todo el mundo se esfuerza en enseñar a los demás, nos vemos obligados a observar que esta instrucción va acompañada, muy a menudo, por trastornos y rebeliones. ¿Cómo es posible que el saber, que el desarrollo intelectual, que son sin embargo cosas buenas, sean el origen de tantos enfrentamientos y desgracias? En realidad, la causa no es el saber, sino la naturaleza del saber. Instruir a la gente, es abrirles los ojos, y lo primero que empiezan a ver son las injusticias, las desigualdades sociales: los demás son ricos y poderosos, mientras que ellos, son pobres y débiles; entonces, evidentemente, la rebelión y el deseo de venganza se despiertan en ellos. Desean toda clase de cosas en las que antes no habían pensado, porque ignoraban incluso de que existiesen, y al no saber cómo obtenerlas, se lanzan a ello de la manera más directa: con la violencia. Diréis: "Entonces, ¿hay que mantener a la gente en la ignorancia y la oscuridad?" En absoluto. Tan sólo hay que reflexionar sobre la naturaleza del saber que se da a los humanos, y tanto si son instruidos como ignorantes, presentarles un saber que les despierte a las aspiraciones del alma y del espíritu."
Omraam Mikhaël Aïvanhov



| | | | | | | | | |
|