SueÑo que llueve
Sueño que llueve y que me estás queriendo. Cielo en congoja, mi corazón deshace, y deshaces con él; lluvia tú mismo me transcurres lento; yo me dejo llevar por los canales inundados de hojas y de pasos y un crujido me llora desde el hueso.
El mundo en selva de colores viene a espejarme en nosotros, y a impregnarnos de misterio, de aroma y de raíces.
A la vera de esta irrealidad, palpita, un niño tibio que indeciso arrima con su barco de papel y quiere navegar nuestra sangre.
Sueño que llueve; acaso estés soñando a mi ritmo, y amándome, y en tanto, esta lluvia silente, tal vez sueñe ser mujer, y sufrir.
Ávido el suelo que la bebe sueña, quizás, ser hombre y consumirla; ruedo como una gota entre tus brazos, vuelco sollozando tu nombre.
Tu deslizas, compactado llanto, por mi cielo y rompes; un deshacer unidos, ya no somos, y despierto. Sin nosotros, y sin sí mismo, el sueño se ha quedado soñando ser la muerte.
Matilde Alba Swann
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