Caminar entre la hierba Sin urgencias, Subterráneo y vagabundo, En el afán de volver a las eternas humedades. Morir, tal vez, bajo amable sombra Sin prisa ni premura, Beber la vida sin apresuramiento alguno En el crepúsculo de tus vides O en la infinita perpetuidad de tu calvario.
El hombre cruza deslindes de un sueño Mágicos espacios Moldeados en el valle de tu tibia geografía.
Estremece el agua su esencia poderosa En abisales misterios de la tierra Sin embargo apenas somos lirios o pájaros Corteza o piel Bajo una iluminada lluvia Para renacer entre las cenizas de este tiempo.
Manuel Antonio Muñoz
|