Yo quisiera caminar
por los senderos ciudadano
por ángeles guardianes, segura
y preocupada solamente por el horario de la sopa
de las muñecas, inventando nombres para llamar
a las luciérnagas, buscando las pilas
que encienden a los bichos de luz,
durmiendo con un sueño de acompasada respiración
y manos apoyadas en las sábanas sin crispación,
como flores
Querer. Y sentir que querer es una margarita
a la que se le ponen
los pétalos en lugar de quitárselos,
y que son unos ojos empañados de llanto
cuando la mano amiga se posa sobre el hombro
para decir estoy aquí, con vos, porque me necesitás.
Darse. Como se dan los hijos, sin especulaciones:
"porque estoy de tu parte".
"Porque me gusta ser tu amiga".
"Porque te quiero como sos".
UN MIERCOLES CON MUCHO AMOR