A veces siento tanta ausencia que no sé si es posible,,, o si se trata de causa y efecto o nada más de mortificación… A veces siento el silencio, aunque os parezca imposible, como daga que escarba en los canales profundos de mi imaginación…
Y siento frío aunque me encuentre arropada Y siento miedo aun en presencia de vos Y es que parezco que soy por demás desdichada en esta cruel e inexplicable clínica depresión…
Yo no suelo mirar por encima de mí misma ni suelo escuchar las voces de fondo en mi habitación; tampoco busco escapar ni negar la autoestima pero para explicaros no basta una explicación…
Tendría que veros directo a la cara y no simplemente rozaros con versos rasgados con presurosa intuición; tendría que dejaros en vuestras manos el alma para que pudieseis juzgar mi desolación
Y podrías pensar que ya no hay esperanza y podríais culparme de insubordinación… más lejos estáis de atinar en la diana pues lo mío, más que nostalgia, es persuasión …
Elizabeth Urribarrí
|