Se va el año y sin embargo no se si me quedo aquí o me voy con él, puesto que no distingo entre mis pensamientos y la realidad, con tu ausencia yo estoy ausente.
Este año que se va se lleva mucho de mí. Entre risas y alegrías, se lleva mi dolor y tu traición.
Mi árbol de navidad esta desolado sin luces ni regalos, sin esplendor, sin amor. Pareciera que con tu adiós te llevaste la alegría de mi navidad, de mi casa.
Lo único que me queda claro es que tu adiós es definitivo y que no volverás, que tendré que empezar el año sola, pero con ansias y deseos de olvidarte ¡Y ganarle esta guerra al amor!