Los cielos se abrieron
como una cortina.
Y la luz Divina, en su aparición
cegó a los pastores
que humilde velaban,
y esto les causaba miedo y turbación.
Mas no les dio tiempo
de hacer conjeturas
porque una criatura, bella, celestial
les dio un gran mensaje,:
La grata noticia,
que el Sol de Justicia es vivo y real.
Ya no sienten miedo
pues nació el Mesías.
La fiel profecía, por fin se cumplió..
Y en sus corazones
tristes y abatidos,
sienten que ha venido
la Gran Redención.
Se oye el dulce canto
que del cielo viene,
Ellos también tienen
ganas de cantar...
Por eso a la aldea
corren presurosos.
Están deseosos
de a Cristo adorar.
Llevan sus zurrones
algo malolientes,
llenos de presentes
para el Salvador.
Son para mostrarle
su agradecimiento.
!Fiel recibimiento
de un Libertador....!
Sencillez, que agrada
a un Dios que es perfecto;
aunque haya defectos
si hay sinceridad,
Dios busca esos hombres
que sinceramente,
se humillan fervientes
ante Su Verdad.
Vamos, pues nosotros,
como los pastores,
a darle loores,
sin hipocresía..
Esta es la alabanza
que un cristiano ofrece,
y que bien merece
JESÚS EL MESÍAS.