Quiero ser fuerte sin ser rudo, Ser amable sin ser débil, Aprender con orgullo sin arrogancia, Aprender a ser gentil sin ser suave, Ser humilde sin ser tímido, Ser valioso sin ser agresivo, Ser agradecido sin ser servil, Meditar sin ser flojo.
Por eso señor te pido:
Dame grandeza para entender, Capacidad para retener, Método y Facultad para aprender, Sutileza para interpretar, Gracia y abundancia para hablar. Dame acierto al empezar, Dirección al progresar y perfección al acabar.
La oración sencilla de un siervo, determina el grado de su grandeza interna. Somos sólo instrumentos en las manos de Dios. Dios es el Grande y Sublime. Ríndete a él hoy.
Con majestad, cabalga victorioso en nombre de la verdad, la humildad y la justicia; que Tu diestra realice gloriosas hazañas. Salmo 45:4.
Con el orgullo viene el oprobio; con la humildad, la sabiduría. Proverbios 11