Te quiero.
Un día sin saber como ni porqué, empecé a amarte. Jamás había sentido esa sensación tan bella. Jamás había amado a nadie como te amo a ti. En mi larga vida he amado a mujeres, muy pocas, pero nunca me enamoré de ninguna como lo estoy de ti. Noches de ensueño, madrugadas para no olvidar, mañanas para conversar, tardes de trabajo juntos. Días de silencios, atardeceres de discusiones, noches de soledad, albas de insomnio, sin ti. Siempre pensado como te sentirás, donde estarás?.
Pasión, éxtasis, compartir, vivir, amar, deseo. Ser distintos a los demás, comunicación total. Y a veces como si alguien cortase el cordón umbilical: desconfianzas, celos, riñas, desconexión, nada, silencios, palabras hirientes que se dicen sin querer.
Has transformado mi vida, mis hábitos, mi ser. Llenaste mi vida, mi soledad, mi habitación de tu olor. Cual alquimista has vertido en la copa, el embrujo de tu mirada, el sabor dulce a fresas de tus labios, el suave tacto de tu piel. Y al apurar esa copa, has hecho que jamás te pueda olvidar.
Pero todo esto amores ya lo sabes, tus oídos lo han escuchado, tus ojos me han visto decírtelo cuando mis manos te acariciaban. Ese amor que siento por ti está en todas partes, en el silencio, en mis risas y mis lagrimas y ha impregnado tu corazón. Estas dentro de mi en cada cosa que hago, digo o pienso.
En la soledad de la madrugada, con las estrellas por testigo, te repito una vez mas, desde lo mas hondo de mi corazón:
Te Quiero…
Autor desconocido por mí.
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