Hola, ¿Cómo estás?, Espero que bien, antes que nada debo aclararte que el mail que te mande ayer no era exactamente lo que me inspira Ale Sanz.
Te escribí eso, porque esperé a que entraras al MSN y no lo hiciste, entonces me enojé, porque en realidad pensé que tenías ganas de hablar, aunque mas no sea pantalla por pantalla, conmigo.
En realidad también pensé que me ibas a llamar una vez que recibieras la plantita que te envié hoy 18 de Enero de 2004, con la notita, pero evidentemente fue algo más en tu día, o no te gustó, o no la recibiste.
En fin, el otro no siempre reacciona como uno quiere, pero bueno, eso depende del otro, en realidad yo pensé que te iba a gustar.
También pensé que el que me iba a llamar para ver que pasaba hoy, eras vos, pero evidentemente esta visto que nuestros caminos están des-encontrados, creo que los dos llegamos a destiempo, y eso siempre me pasa, tengo una manía de encontrarme con personas así, nada puedo hacer.
En estos momentos estoy aquí, con esta sensación de vacío y de soledad... y la verdad es que a menudo pienso en ti... me pregunto como estarás, que harás, y si sos como en realidad decís que sos o te escucho, a veces me pregunto por que el amor nos hiere de diversas maneras, con las formas de la soledad... en un rincón del vacío.
Y es que a veces Dios pone en nuestro camino a diferentes personas, hasta hacernos llegar a la que es la adecuada para nosotros, y cuando llega no la ves, no tenes la menor idea de que es ella la que tanto esperabas.
No sé, es como que las palabras vuelan en mi mente, y ninguna me ayuda a describir este momento de mi vida, pero solo sé que debo escribir, algo que no sabía como representar, algo que en mi corazón late con emoción, pero, es que hay veces que la tristeza te ata y no te deja expresar toda esa sensación, todo ese sentimiento que recorre tu cuerpo, que abarca tu ser y congela tus sentidos.
Es verdad, hay veces en que solo sigo lo que me dicta el corazón y se que esta mal, ya que mi mente se encuentra en confusión y no deja que pueda dibujar una sonrisa llena de alegría como la que todos quisieran ver, por eso el amor se guía del corazón, sentimiento que a veces lo siento esquivo.
Pero es inevitable, siempre esta ahí, simplemente lo debo descubrir para que así toda esa alegría vuelva, para que así todas las noches sean bellas, y vuelva lo que mi corazón tanto anhela.
A veces me pregunto que es lo que hiciste que me hace cometer locuras, como la de enviarte la planta, que por si no sabías es una ceremonia.
Es algo raro, un poco extraño, pero debo confesarte que hoy necesité de tu comprensión, de esa tenue claridad, que me reflejan tus palabras.
Quería compartirte mis temores, y que con un abrazo prolongado, me hicieras recobrar las alegrías; hablar contigo una vez más, de los vértigos nefastos de lo adverso, me sentí a la deriva, azotada arteramente por angustias.
Así es como me siento últimamente.
Hoy me hubiera gustado sentir la seguridad de unas paredes blancas, asomarme a la ventana y encontrar la luz del sol para mitigar así, la sensación punzante de las incomprensiones.
Solamente quise rescatarte del silencio, quise rescatarte de ese, tu lugar de trabajo, y distenderte, decirte que me hace bien hablar con vos y que cuando no lo hago lo extraño en mi espacio.
Y es que lograste grabarme un grato recuerdo, por esa forma tan amena de comunicarnos, al sentir afinidad de pensamientos, al creer en la fortaleza de esta cadena de comunicaciones que nos ha mantenido unidos...
Tu ostracismo me dejó esta inquietud, al no encontrar tus huellas en mi camino, por palpar la voz apagada de la indiferencia, atendiendo mi llamado por cortesía... fue por ello que me tomé la libertad de salir en tu búsqueda.
Con esas líneas que te entregaba mi añoranza, vertí la sensibilidad que en ese momento me embargaba.
Pero es que de pronto y sólo por manifestar mis inquietudes por ti, me sentí terriblemente desubicada, tratando de encontrar respuestas lógicas y en tu hermetismo voluntario, tal vez ni te enteraste de mis lamentos.
Es por ello que creo que a veces, por diferir de puntos de vista y conceptos, quizás contribuí o contribuyo a tu lejanía incomprensible.
Ojalá que en tu corazón no tengas sentimientos encontrados.
Me dolería mucho crearte confusiones, porque al envolvernos en la atmósfera sutil de fantasías, solo fué y será por el placer de compartir un momento inolvidable, jamás con la intención mezquina de lesionar tus emociones, ni desequilibrarte con ideas confusas por lo que lees.
Ignoro si las brumas lejanas oscurecen la visibilidad de tus horizontes... solo el tiempo se encargará alguna vez, de brindarnos la claridad.
Confío plenamente en tus apreciaciones, y sé que las entenderás, pero si tu silencio se prolonga ante mis ojos... sabré que desconociendo los motivos... irremediablemente te perdí... sin siquiera tenerte.
Son muchas las cosas que me están pasando, y las que me van a pasar, y no me refiero con esto a solo lo que me sucede en mi vida sentimental, sino también, en mi vida laboral, etc. etc. etc. pasa que a veces una tiene miedo de que la defrauden.
Defraudar... qué palabra tan aborrecible, pero que culpa tengo de que estas cosas hallan florecido a destiempo, en contra de todo pronóstico.
Pienso que lo complicado sigue siendo lo maravilloso del encuentro y el secreto, la forma casi despreocupada en que se dieron los sucesos.
Como tú y yo sabemos, la vida te presenta, con frecuencia, situaciones en la que tienes que optar por alguien o algo y según la opción que elijas pasarán unas cosas u otras.
Antes de decidirte por una de ellas, se ponen en funcionamiento esos mecanismos mentales que tratan de autoconvencerte de lo conveniente de una u otra opción.
Dependiendo de tu voluntad, permitirás a tu mente que se pare a reflexionar y deje hablar con igual oportunidad a los pros y a los contras, para lo que te puede ayudar esa gran cualidad que se llama intuición, a la que sueles escuchar menos de lo que se merece.
Sobre todo, cuando quieres oír la respuesta que tú misma ya has elaborado. Sin embargo, la que te da el buen análisis de pros y contras asesorado por la intuición quizá no te interese, por lo que no las escuchas y la ahogas en tu interior.
Es a través del trabajo lento, costoso, doloroso, que vas haciendo sobre ti mismo, cuando vas descubriendo que ya no te sirve poner tus miserias en los otros, aunque hayan sido causantes de muchos de tus problemas.
Ellos son como son, y si en algo pueden cambiar en su actitud hacia ti, será, sobre todo, a través de tu propio y principal cambio.
Sé que cuando tú te respetes, te valores, te estimes, seas consecuente con tus criterios, ellos podrán saber quién eres y donde estás para poder respetarte, valorarte y aceptarte.
Entonces podrás caminar a su lado, y si no puedes, será que tus y sus caminos son diferentes o no es tu momento ni el suyo.
Tratar de convencerlos de lo que tienen que hacer es una alternativa muy ardua y de gran desgaste, que la mayoría de las veces se vuelve, injustamente, en tu contra.
Los demás cambiarán por su propia voluntad, no por tu imposición y recuerda que es su responsabilidad, no la tuya.
Nadie es infalible o inamovible.
Tenemos derecho a rectificar, a equivocarnos, a ser nosotros, se que tendrás momentos de flaqueza, días en los que te parezca que el sol luce para todos menos para ti, ganas de renunciar.
Te sentirás incomprendido por aquellas personas que te importan.
Todo ello forma parte de tu proceso de crecimiento para esa mejor relación contigo misma y con los demás.
Porque el resultado es muy valioso, el camino no es precisamente fácil, pero ¡merece la pena se han cruzado en tu vida, afortunadamente, personas y medios para ayudarte.
Pero no quieras seguir haciendo el molde según tus "convenientes" y "defensivos" patrones.
En su día fueron tu única herramienta, hoy ya no te sirven.
No se si entendiste la carta, si te gusto o no, la cosa es que ya voy por el tema 12 de mi CD y ahora el que canta es Claudio con “Te Desafío”, y no hay ninguna indirecta, solo decirte que te desafío a que me puedas escribir una carta, no se si emotiva, o sentida, o larga y con mucho contenido como la mía, o que de una vez por todas te dejes de vueltas, miedos y de una vez me invites eso que me debes, sino yo aquí me planto y doy la media vuelta.